La gira por Querétaro resultó un auténtico dolor de cabeza para los Ángeles de Puebla, que en el segundo juego de la serie, cayeron a manos de los Libertadores por marcador de 111 puntos a 85, en la aduana que se llevó a cabo la tarde del domingo en la duela del Gimnasio "Juan Manuel Arteaga".
Juego en el que el coach, Israel Zemeño, mandó de inicio a Daniel Onofre, Luis López, Jeffrey Burgos, Travis Elliot y William Green, quienes de inmediato tomaron la iniciativa tras el silbatazo de arranque, lo que pronto colocó la pizarra a favor de la quinteta azul y blanco.
No obstante, al cabo de su primer tiempo fuera, los locales ajustaron su estrategia y comenzaron el repunte, logrando igualar cifras y prácticamente en un abrir y cerrar de ojos inclinarlas a su favor, lo que dejó el primer lapso con un 27 a 22 para los queretanos que sacaron provecho de sus artilleros con disparos de larga distancia.
Ya para el segundo lapso, los poblanos echaron mano de sus elementos en banca para tratar de mantenerse cerca del rival, que encontró la ruta para hacerle daño a los visitantes de manera continua, lo que derivó en una cómoda ventaja de más de diez unidades, cuestión que generó cierta desesperación en los foráneos.
Aún cuando Jeffrey Burgos trató de meter a los suyos de nuevo al cotejo, Libertadores nulificó al resto de los integrantes alados en el terreno de acción, cuestión que dejó el 55 por 39 para los locales, que así se fueron satisfechos al vestuario para la pausa del medio tiempo.
Al volver del descanso, con una actitud renovada, Ángeles trabajó para acechar al rival en el tanteador, donde gracias a la combinación de los estelares Luis "La Pulga Bestial" López y Jeffrey Burgos, la historia parecía tomar rumbos distintos, sin embargo Querétaro no bajó en ningún momento el ritmo y siguió su camino con dirección al triunfo.
De la mano de Vance Cooksey y de Jonathan Rodríguez, que descifraron la fórmula impuesta por la defensiva angelopolitana, Querétaro continuó la cosecha a su favor, concluyendo el periodo con un 86 por 66 que ya era definitivo y que obligó a los visitantes a cerrar con dignidad.
Con jugadores como Óscar Limón, Roberto Rivera, Gerardo Chávez y Manuel Yáñez, el coach Zermeño trató de hacer más decorosa la derrota del cuadro, lo que en cierta medida surtió los efectos deseados, pero no lo suficiente como para volverse a meter al juego que tuvo un ganador por anticipado.
Así, al son de 111 por 85, Ángeles sufrió su décimo primer revés de la temporada, donde en esta ocasión, Burgos culminó como el mejor anotador con 24 tantos, seguido por Luis López que contribuyó con otros 21, que al final no fueron del todo suficientes y los obliga a seguir trabajando para encarar sus siguientes cotejos.
ARP