Los entrenadores de los equipos de la NBA saben que volver a la actividad no será algo sencillo. Más de un mes sin competencia provocará que solo algunos jugadores estén listos, así que ayer se pronunciaron porque haya al menos un mes de entrenamientos antes de que haya cualquier juego.
“Tienes algunos jugadores con el privilegio de estar aislados en sus lujosas mansiones con gimnasios completos, y [quienes] prácticamente construyeron sus propios centros de entrenamiento olímpico”, dijo un trainer al portal ESPN, “pero hay algunas personas aisladas en su apartamento de poco más de 100 metros cuadrados o en la casa de sus padres. Y ese es el caso de los 450 jugadores poco conocidos de la NBA. Creo que se debe tomar la decisión en el mínimo común denominador”.
El pasado 15 de abril, la NBA entregó sus pagos completos a todos los jugadores. El siguiente día de pago será el 1° de mayo. No hay nada claro de qué sucederá entonces, como puede leerse entre líneas de las palabras que este lunes dio el comisionado Adam Silver: “Durante la última semana dije hay que aceptar que, al menos durante el mes de abril, no estaremos en condiciones de tomar decisiones. Y no creo que eso necesariamente cambie el 1° de mayo”.
Tim Frank, portavoz de la NBA, apuntó que aun cuando la liga obtenga el permiso para volver a realizar juegos, “Todos los escenarios de regreso contemplan un periodo de entrenamiento apropiado para garantizar la salud y el bienestar de nuestros jugadores”.
Y es que el temor es que un regreso precipitado pueda provocar lesiones en jugadores que fuercen su cuerpo a dar al máximo luego de haberse encontrado en un largo periodo de ejercicios controlados.
El deporte moderno es un negocio, y el gerente general de un equipo del Este dijo: “Necesito que los muchachos empujen sus cuerpos durante al menos 30 días antes del primer partido significativo. Y por significativo me refiero a un juego de postemporada”.
Pero consciente de la importancia económica, apuntó: “No sé cómo podríamos tener ese lujo (de entrenar 30 días). Eso sería genial, pero si tuviera que presionarlo, mínimo necesitaría de 10 días a dos semanas”.
El problema es que no hay claridad en el tiempo que se extenderá la contingencia, “y mientras más largo sea, más largo será también el tiempo para regresar”, dijo al reportero Baxter Holmes el trainer que pidió mantener su nombre en el anonimato.