Jake Paul y Tyron Woodley se enfrentaron en el Amalie Arena de Tampa en una pelea que -por ratos- fue abucheada por los aficionados que lucían decepcionados. Sin embargo, todo esto terminó en el sexto asalto, cuando el youtuber estadunidense soltó un derechazo que mandó a la lona a su rival.
Previamente, Paul ya había vencido a Woodley por puntos el pasado mes de agosto, sin embargo había prometido imponerse por nocaut y lo cumplió. Con ello, Jake extendió su invicto a cinco peleas en su corta carrera.
En los primeros rounds el espectáculo quedó a deber mucho, pues los boxeadores no lograban conectar de buena forma sus golpes y la pelea se tornó aburrida; para la primera mitad del compromiso comenzaron a aparecer las artes marciales mixtas.
Para el sexto asalto la pelea dio un giro totalmente favorecedor para el espectáculo, pues Jake Paul soltó un derechazo que entró por completo y provocó que Woodley cayera tendido sobre la lona.
NO QUIERE DEJAR EL BOXEO
Antes de incursionar en el boxeo, Jake Paul sufría de falta de flujo sanguíneo ocasionado por las conmociones cerebrales que tuvo durante su paso en el futbol americano.
Por ello, doctores le han recomendado al youtuber dejar el pugilismo, pero se niega a retirarse. En una entrevista con Graham Bensinger, Paul confesó que se realizó un escaneo en su cabeza y el doctor le dijo que su sangre no fluía de forma adecuada.
"Me sometí a un escaneo cerebral antes de comenzar a boxear y el médico me dijo que había una falta de flujo sanguíneo debido a las conmociones que sufrí en varias áreas del cerebro durante mi carrera en el fútbol americano".
Los doctores le han recomendado dejar el box, porque tiene signos de daño cerebral a largo plazo, sin embargo, no se toma en enserio las sugerencias de los médicos. "Esto es lo único que le pueden aconsejar", comentó al respecto.
FCM