Sin importar los 15 años de inactividad en los cuadriláteros, Mike Tyson se mostró intenso durante su pelea ante Roy Jones jr, por lo que el estadunidense continúa entrenando para tener una próxima pelea de exhibición.
No obstante, para su regreso a los cuadriláteros, Iron Mike llevó una rigurosa dieta y exigentes sesiones de entrenamiento. El boxeador de 54 años siguió al pie de la letra todas las indicaciones de su coach y nutriólogo, lo cual se vio reflejado en su estado físico en la pelea.
El medio británico The Sun contó que Tyson consume 4 mil calorías por día, donde la avena, leche y las vitaminas con magnesio y aceite de pescado son la base su dieta.
En el almuerzo come pechuga asada, acompañada de arroz y diversos tipos de granos, con el fin de nutrir su cuerpo con proteínas, previo a todos sus entrenamientos.
“Me di cuenta que las cosas que son buenas para otras personas, como la col rizada, las verduras y los arándanos, para mí son realmente venenosas. Quiero que se vea la fuerza en mi cuerpo. Antes tenía presión arterial alta, estaba casi muriendo y tenía artritis. Convertirme en vegano me dio la oportunidad de vivir una vida sana. Estaba tan congestionado de todas las drogas y cocaína que difícilmente podía respirar”, reconoció recientemente Mike en una entrevista con Joe Roegan en su podcast.
Por otro lado, Tyson reconoció que se entrena entre 6 y 8 horas al día, lo cual se ve reflejado en los videos que comparte en sus redes sociales de sus sesiones de entrenamiento. Además, comienza su rutina a las 4 de la madrugada con trotes de 4 y 8 kilómetros.
Al llegar a casa, duerme unas horas más y despierta a las 10 de la mañana para comenzar otra serie de ejercicios, y finaliza su día a las 21:00 horas tras ver videos de box de sus posibles próximos rivales, Evander Holyfield y Lennox Lewis.
RGS