El sueño de todo entrenador es tener campeones mundiales en su esquina, pero su ambición más grande es que esos peleadores se conviertan en un referente a prueba del tiempo. Pero para el entrenador mexicano Nacho Beristáin estar en la esquina de Julio César Chávez González no fue algo tan placentero como se podría creer.
“Julio es el mejor peleador que México ha dado al mundo. Una maravilla de peleador y de persona, pero estar en su esquina fue dificil por la popularidad que tenía, era terrible estar en la esquina. Tenía a Don Cristobal que esta malito… Fue terrible estar ahí en su esquina” recordó el entrenador miembro del salón de la fama, quien solo estuvo en la esquina de JC Chávez para la pelea con Miguel Ángel González, en una charla virtual con el presidente del Consejo Mundial de Boxeo.
Beristáin habló sobre sus orígenes e incursión en el deporte de los puños, destando la diferencia que era entrenar junto al Gran Campeón Mexicano y a su hijo Julio César Chávez Jr.
“Con Julito las cosas fueron diferentes, un poco difícil, porque es muy indisciplinado”, abundó.
Beristain, de 80 años de edad, reveló que por la crisis sanitaria por coronavirus se encuentra recluido en casa y aunque ya está desesperado por volver al gimnasio – pues asegura que su intensión es no dejar el boxeo ni en corto ni mediano plazo – esperará al momento que las autoridades permitan reanudar labores.