Caras largas, tristeza, decepción y hasta enojo, dominó entre los estudiantes poblanos de turnos vespertinos y de instituciones de educación superior tras la eliminación de la selección mexicana del Mundial de Futbol de Qatar 2022.
Los estudiantes de turnos matutinos salieron alrededor de las 13:00 horas y junto con sus padres y madres, agilizaron el paso para llegar a casa y seguir el duelo de la selección mexicana; mientras que, en los turnos vespertinos, se organizaron para no perderse el partido.
A la par, los estudiantes de instituciones de educación superior siguieron el último partido del combinado nacional en la justa mundialista desde pantallas colocadas en las instalaciones educativas o desde sus computadoras y dispositivos móviles.
En el caso de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), los integrantes de la comunidad universitaria se reunieron en diferentes puntos de Ciudad Universitaria (CU) y en el Área de la Salud, en donde participaron de diversas dinámicas y disfrutaron del encuentro México-Polonia.
Al inicio del partido que comenzó minutos después de las 13 horas, entre los estudiantes había confianza de que la selección mexicana podía ganar el tercer partido en la Copa Mundial de la FIFA Qatar 2022 ante Arabia Saudita.
Tras la transmisión del primer tiempo en distintos puntos de Ciudad Universitaria, como las explanadas norte de la Torre de Gestión Académica y Servicios Administrativos; del auditorio Julio Glockner, y de la Facultad de Derecho, así como el auditorio de la Dirección de Dirección General de Cómputo y Tecnologías de la Información y Comunicaciones (DCyTIC), los alumnos docentes y trabajadores comenzaron a desanimarse.
Para el segundo tiempo, entre los miembros de la comunidad universitaria y los estudiantes, la esperanza de que el representativo nacional pasara a la siguiente ronda se reavivó cuando Henry Martín anotó al minuto 47.
Para el minuto 52, Luis Gerardo Chávez anotó el segundo gol y los aficionados al futbol se emocionaron ante la posibilidad de que México alcanzara el pase a los octavos de final.
En los últimos minutos del duelo, en las instalaciones educativas, los estudiantes, docentes y trabajadores comenzaron a corear: “¡Sí se puede!”, “¡Sí se puede!”…
Al final del duelo, en tiempo de compensación y ante la anotación del jugador Salem Al Dawsari, la tristeza dominó entre los aficionados que vieron que se concretó la eliminación de la selección mexicana.
De la misma forma, los sentimientos de decepción se observaron en instituciones de educación superior como la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), la Universidad Iberoamericana Puebla y otros campus universitarios donde se colocaron pantallas para que las comunidades estudiantiles, de docentes y de trabajadores pudieran seguir la transmisión del duelo que se disputó en el estadio Lusail.
“¡Jugaron como nunca y perdieron como siempre!”, expresó una de las alumnas en Ciudad Universitaria al final del partido de la selección mexicana, manifestación que fue apoyada por parte de los aficionados.
CHM