En el transcurso de la semana en Boston, Massachussets, un hombre entró a robar a la mansión del otrora quarterback de los New England Patriots, Tom Brady y de su esposa Gisele Bündchen, un acto 'normal' -relativamente-; sin embargo, el hombre fue aprehendido por los cuerpos de seguridad tras encontrarlo dormido en el sótano de la vivienda.
El hombre, del cual no dieron el nombre, de acuerdo a varios medios de Massachussets es un 'viejo conocido' para la estrella de la NFL, pues el año pasado fue acusado de sustraer una camiseta de Tom Brady del Salón de la Fama de los Patriots, la cual estaba valuada en 10 mil dólares.
Para fortuna de Brady y su familia, desde que se concretó su pase a los Tampa Bay Bucaneers, nadie habita en la casa, por lo que la intrusión del hombre no pasó a mayores. El hombre, que al parecer está obsesionado con el quarterback, entró a la ex residencia del jugador debido a que la compañía de mudanza que está trabajando en el hogar se dejó una puerta abierta.
Actualmente, la mansión -la cual cuenta con un extenso jardín- está a la venta por 28 millones de euros.
EML