Ocatagón, una de las máximas leyendas de la lucha libre mexicana demostró que no solo cumple sus promesas arriba del ring, sino que abajo del cuadrilátero es un hombre de palabra, y además un buen cocinero.
El pasado 6 de enero, el Amo de los Ocho Ángulos partió la Rosca de Reyes, donde salió con su domingo siete, ya que le salió el muñequito, así que este dos de febrero en el Día de la Candelaria tenía que poner la tamaliza, para deleitar los paladares de sus compañeros y amigos que fueron testigos de que le salió el muñequito.
Para pagar su deuda, Octagón echó mano de una empresa llamada Tamalli, la cual fabrica este delicioso platillo mexicano. Al arribar, el gladiador inmediatamente tomó las medidas de sanidad y se colocó una bata para no ensuciar y contaminar la masa. Posteriormente le dieron un recorrido por la empresa donde se realizan tamales tradicionales y gourmets.
El Amo de los Ocho Ángulos conoció cada uno de los procesos, los cuales se los explicaron con detenimiento que se siguen para realizar los tamales y tras saludar a los trabajadores puso manos a la masa para realizar sus ‘Octamales’.
Una vez que terminó el proceso de la fabricación de sus ‘Octamales’, Octagón procedió a darles el visto bueno degustando uno de rajas. Al concluir, el Amo de Ocho Ángulos compartió su experiencia en la realización de este platillo cien por ciento mexicano.
“Es un arte hacer los tamales, pero es más arte comerlos. La verdad fue una buena experiencia, aquí en Tamalli nos enseñaron el paso a paso de como hacer tamales con una producción masiva, pero hay opción de prepararlos en casa o apoyar a los emprendedores que día a día preparan sus tamales”.