En medio del conflicto armado entre Rusia y Ucrania, muchos empresarios rusos se han visto afectados por las sanciones económicas de la Unión Europea y sus integrantes, como es el caso de Román Abramovich, quien hasta hace unos días era propietario del Chelsea y que ha visto su patrimonio en el Reino unido comprometido.
El conjunto de los blues también ha sido salpicado por los castigos a su ex dueño, pues sus cuentas han sido congeladas y su fututo es una incertidumbre por su estabilidad financiera.
Otra de las propiedades que el magnate ruso podría ver irse de sus manos es una lujosa mansión de Kensington que podría fungir como refugio para los ucranianos que huyen de la invasión rusa en su nación.
Uno de los miembros del parlamente británico, Michael Gove, ha propuesto que este inmueble sea hogar temporal de las personas que han salido de Ucrania debido a los bombardeos y conflicto bélico. Con el fin de minimizar sus pérdidas, el propio Abramovich ya puso en venta su mansión, la cual está valuada en 150 millones de libras, unos 179 millones de euros.
La propiedad es muy grande y podría alojar a decenas de afectados por la guerra, pues cuenta con 15 dormitorios e incluso ya ha sido utilizada como embajada de Rusia. Cabe destacar que Román ha sido blanco de estas sanciones económicas por sus vínculos estrechos con Vladimir Putin.
El Chelsea en jaque
El banco inglés Barclays ha congelado las cuentas del Chelsea e inhabilitado temporalmente sus tarjetas de crédito por las sanciones impuestas por el Gobierno británico que pesan sobre el club y su dueño, Roman Abramovich.
El Chelsea, que no puede hacer operaciones con jugadores ni ingresar dinero a través de la venta de merchandising y entradas, recibió un permiso especial del gobierno para poder seguir operando y pagando a sus empleados, pero la entidad bancaria Barclays está a la espera de confirmar que puede dejarles sacar dinero sin incumplir las sanciones del Reino Unido.
Esto ha dejado al Chelsea en una situación muy delicada, ya que muchos de los empleados del club que tienen tarjetas en Barclays no pueden utilizarlas, además de que el club, sin acceso a esas cuentas, no puede pagar los salarios.
MGC