Un aficionado saltó a la cancha en el partido de Europa League entre el PSV Eindhoven y el Sevilla para agredir físicamente al arquero del equipo visitante, dándole un puñetazo en el rostro, que el arquero repelió tirándolo al césped y conteniéndolo hasta que llegó la seguridad del estadio.
Los jugadores de ambos equipos llegaron inmediatamente para apoyar al arquero Dmitrovic, que recibía abucheos de la grada por defenderse de la agresión del aficionado, quien fue sacado del terreno de juego por los oficiales de seguridad presentes en el estadio.
El altercado se dio en la parte final del partido que ganó el PSV 2-0, resultado que no les alcanzó para clasificar a la siguiente ronda de la competencia europea, por lo que se puede intuir que los ánimos estaban muy calientes en la tribuna local.
Tras la agresión, Marko Dmitrovic confesó que "tenía ganas de pegarle”, pero se contuvo:
“Un aficionado me empujo por la espalda e intento pegarme, me rozo un poco la nariz, y de verdad tenía ganas de pegarle, pero nunca es bonito. Si quieres pelearte, vete a un deporte como el boxeo, el futbol no se merece esas cosas”, declaró el portero.
“Imagino que estaba enfadado por el resultado de su equipo, imagino que también un poco alocado o borracho. Me empujó y lo paré hasta que llegó la seguridad. Tenía bronca en mi cuerpo, pero esas cosas no pueden pasar y espero que sean castigados”, agregó Dmitrovic.
El Sevilla se clasificó a los octavos de final de la Europa League, pese a sufrir y perder 2-0 en el campo del PSV Eindhoven en la vuelta del repechaje de la segunda competición europea de clubes más importante.
El equipo español aprovecho la ventaja de 3-0 que consiguió en la ida para obtener el pase a la siguiente fase de la Europa League, aunque los goles de Luuk de Jong y Fabio Silva del PSV, dieron emoción a los últimos minutos del partido.
EORM