Leopoldo Luque, el médico de cabecera del ídolo deportivo Diego Maradona, fue "imputado de homicidio culposo"; posteriormente la justicia argentina ordenara el allanamiento de sus bienes en propiedades.
Ante ello, el doctor habló en su defensa, señalando que el deceso del D10S no tuvo nada qué ver con la operación que le realizó en noviembre de un coágulo en la cabeza.
"Yo te quiero ver a vos, Diego muerto con un hematoma en la cabeza, eso había que resolverlo. Era quirúrgico por sus dimensiones, no lo podía dejar así. El deceso no tuvo nada que ver con eso. La autopsia tiene que decir lo del golpe", declaró.
Tras la muerte de Maradona, Luque recalcó que El Pelusa era "una persona sumamente difícil, que no se dejaba asistir ni mucho menos llevar al hospital".
Ahora, tras su muerte, recalcó esa situación y, además, señaló que tras la operación debió quedarse en un centro de rehabilitación, pero era una persona sumamente complicada.