Una fiscal de Buenos Aires inició una investigación de oficio del ataque que los hinchas de River Plate provocaron contra el autobús en el que viajaba el plantel de Boca Juniors para jugar la Final de la Copa Libertadores en el Estadio Monumental, la cual finalmente fue aplazada para el domingo 25 de noviembre.
Según informaron, la fiscal Adriana Bellavigna investiga los incidentes ocurridos a las puertas del estadio de River, en torno a las 15:00 horas local, dos horas antes del inicio previsto del encuentro entre ambos equipos. La procuradora decidió incautar el autobús para hacer pericias.
Los médicos de la Conmebol emitieron un comunicado en el que reconocieron lesiones en algunos jugadores de Boca Juniors -Pablo Pérez y Gonzalo Lamardo fueron llevados a una clínica hospitalaria- tras el ataque de los hinchas de River, pero aseguraron que no existía "causal" para suspender el partido.