El Salernitana goleó este domingo al Monza (3-0) en una segunda parte en la que fue muy superior al conjunto propiedad de Silvio Berlusconi y que le sirve para alejarse del descenso.
La novedad fue el regreso de Guillermo Ochoa a la titularidad en el arco de los de Salerno luego de ser relegado a la suplencia en los últimos dos partidos para darle ese lugar a Luigi Sepe, quien cometió un error en la pasada fecha del futbol italiano.
Con el resultado de este día, el mexicano firmó su primera portería sin goles desde que llegó al Calcio para reforzar al quipo que busca salivarse del descenso.
Aunque con un partido jugado más, ya son siete puntos los que lo de Salerno (sur) aventajan al Hellas Verona, el primer equipo en descenso. Todo gracias a una gran segunda mitad en la que se dieron un festín de goles ante un Monza asentado en la zona media de la tabla.
No ha tardado en surtir efecto la mano del luso Paulo Sousa, nuevo entrenador del Salernitana que le ha dado una bocanada de aire fresco al equipo para poder acercarse al objetivo de la salvación.
Los goles del maliense Lassana Coulibaly, del chipriota Grigoris Kastanos y del italiano Antonio Candreva, todos ellos en la segunda mitad, fueron el resultado de un partido que se presentó igualado en el inicio pero que acabó dominando con claridad el conjunto local para sellar una merecida victoria contra un rival complicado.
La victoria refuerza el objetivo del Salernitana, que compite por segunda temporada consecutiva en Serie A por primera vez en su historia; mientras que el Monza pierde la oportunidad de colocarse octavo empatado con el Juventus, cerca de puestos europeos
MGC