La Final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors pasó de ser una gran fiesta a una auténtica pesadilla, pues los actos violentos registrados el 24 de noviembre en el Estadio Monumental, obligaron a la Conmebol a posponer el duelo e incluso amenazar con no jugarlo.
Naturalmente, el curso de esta polémica ha dado declaraciones de todo tipo por parte de sus principales involucrados, desde el presidente de la Conmebol, hasta jugadores, directivos y el propio mandamás de la FIFA, Gianni Infantino.
La decisión de jugarse o no el encuentro de vuelta de esta Final depende de lo que determine la Comisión Disciplinaria de la Conmebol, que, en caso de dar luz verde, se celebrará el 8 o 9 de diciembre en una sede fuera de Argentina aún por definir.
Lo anterior ha generado todo tipo de reacciones que a continuación te presentamos.