Raúl Jiménez tuvo la que, hasta el momento, es su mejor actuación en lo que va de la presente temporada de la Premier League, esto al dar las asistencias de los dos tantos que le sirvieron al Wolverhampton para derrotar al Manchester City.
No obstante, la primera de ellas, fue espectacular, puesto que el ariete mexicano de los Wolves tomó la pelota desde su propio terreno y la condujo, de manera perfecta, por poco más de 30 metros.
En su paso, se topó con tres elementos de los citizens; sin embargo, el que quedó pagando fue Nicolás Otamendi, al que Jiménez propinó un tremendo túnel, para que -posteriormente- el mexicano asistiera a Adama Traoré para el 0-1.