En marzo del 2015 entró en vigor el primer Manual de Estadio Seguro homologado en todo el país, mismo que fue elaborado por la Liga MX en colaboración con las autoridades para salvaguardar a los aficionados ante diversos escenarios que pudieran alterar el orden.
El manual consiste en una serie de recomendaciones y puntos a seguir para antes, durante y después de los partidos de futbol, aunque no estipula alguna sanción para los clubes o plazas que no lo ejecuten de forma adecuada, como ocurrió este fin de semana en el Clásico Regio, donde una pelea dejó a un aficionado de Tigres hospitalizado.
Según el capítulo III del manual, que se refiere a la coordinación con las instituciones de seguridad pública y protección civil, los aficionados visitantes deben ser acompañados por “agentes de seguridad desde algún lugar cercano al estadio y/o desde su ingreso a la ciudad sede del partido”.
Lo anterior quedó evidenciado en diversos videos en los que aparece una patrulla antes de que se desatara el pleito entre barristas; sin embargo, ésta abandona el lugar momentos antes del enfrentamiento.
Aún no se sabe si la patrulla abandonó el lugar debido a la falta de apoyo para atender la situación, pues según el Manual de Estadio Seguro, se le debió asignar “el equipamiento necesario de acuerdo a sus funciones, tomando en consideración para su realización la normatividad local aplicable en cuanto al uso de la fuerza se refiere”.
OMITIERON REUNIÓN CON BARRISTAS
Al ser considerado un partido de alto riesgo, el Manual del Estadio Seguro obliga al Clásico Regio, en su capítulo IV de acciones previas a la realización del partido, a una reunión previa con los barristas de Tigres y Monterrey, misma que no se dio en la pasada junta de seguridad celebrada el 21 de septiembre.
En dicha reunión con líderes barristas, que debió correr a cargo del director de seguridad del Estadio Universitario se debió “definir la logística y medidas de seguridad, antes, durante y después del partido”.
Además, las barras debieron comprometerse a “no alterar el orden público” ni “generar vandalismo y hechos delictivos”.
LOS ANILLOS DE SEGURIDAD ‘INVISIBLES’
El Manual del Estadio Seguro también destaca que “todas las sedes deberán contar con por lo menos tres anillos de seguridad”, que en el caso de la bronca presentada antes del Clásico Regio, debió aplicarse de la siguiente manera.
- “Segundo anillo de seguridad a una distancia de por lo menos 500 metros del estadio, para la detección de grupos de animación o aficionados sin boleto que puedan causar problemas”.