Cuando se piensa en Jorge Campos, la primera impresión que se viene a la mente es, casi sin dudarlo, es su andar con la selección mexicana, sus actuaciones en las Copas del Mundo de 1994 y 1998, el título de la Copa Confederaciones de 1999, etcétera. Si a clubes nos referimos, obviamente se identifica con los Pumas, equipo con el que debutó hace 32 años, en 1988.
No obstante, el comienzo de su travesía por el futbol profesional pudo ser muy distinto, pues pudo haber debutado con el Cruz Azul, equipo con el que se estuvo probando en categorías con límite de edad y, en ocasiones, en el primer equipo.
En entrevista, el ex cancerbero reveló que La Máquina lo dejó ir por su edad, pues en aquel entonces él rondaba por los 16 años. Tras ello, Miguel Mejía Barón, lo llevó a probarse a Pumas.
“Era el seminario, estuve como un mes, no recuerdo mucho. No me corrieron, simplemente me dijeron que estaba muy chavo, en esa época los de la reserva tenían 18, 20 años y yo estaba entrenando con gente de reserva y del primer equipo. El Chino Estrada me tenía mucha confianza y él decía que yo podía jugar de portero sin ningún problema, nada más que me entrenara Miguel Marín, pero llegué y ya no estaba”, dijo.
Y agrega: "Estaba en Cruz Azul, voy y me regreso y en el intermedio viene Pumas a jugar. Me ponen a jugar, me ve Mejía Barón, habla conmigo y me dice que me vio muy tranquilo para tener 16 años. Estrada le dice que iba a regresar a Cruz Azul, pero Mejía Barón le dice que no, que vaya a Pumas y ya estuve entrenando, pero igual me regreso porque mi papá quiere que terminara la prepa”.
Sin embargo, el destino volvió a unir a Campos con la escuadra celeste. Poco más de una década más tarde, en 1997, el guardameta llegó al Cruz Azul para jugar el torneo Invierno 97', mismo en donde La Máquina resultó campeones. Tras ello, el cancerbero dejó al club sölo seis meses después de su llegada.