En estos días la Liga MX presentó dos caras opuestas: la del reciclaje y la de la renovación en los banquillos del futbol mexicano.
Los últimos dos equipos que cesaron a su entrenador –Toluca y Mazatlán– se dieron a la tarea de buscar un sustituto; mientras uno recurrió a un técnico ya de dilatada experiencia, pero nulos éxitos, el otro apostó por ratificar al que había asumido el interinato; sí, un rostro nuevo en la de por sí cerrada baraja de entrenadores en la Liga MX.
LAS IRONÍAS
A principios de este año, Toluca pensó que el regresó de José Manuel de la Torre, quien había salido campeón con los Diablos en el Bicentenario 2010, volverían los tiempos de gloria. Sin embargo, el Chepo no encontró la regularidad con el conjunto mexiquense, ni en los 10 partidos que dirigió en el Clausura ni en los 12 del Guard1anes 2020.
El paso tan irregular y los problemas en el vestidor desembocaron en el cese del técnico quien, desde que fue despedido de la selección mexicana en 2013, no ha podido destacar con ningún club y va acumulando varios despidos, pues antes salió de la misma forma de Chivas y de Santos.
Cuando todo hacía indicar que los Diablos Rojos apostarían por algún otro entrenador conocido en la institución, como Hernán Cristante o José Saturnino Cardozo, la directiva decidió darle un voto de confianza a Carlos Adrián Morales, quien el domingo debutó en los banquillos con triunfo sobre Cruz Azul.
La otra historia es la del Mazatlán, la nueva plaza de la Liga MX, aunque con un pasado más que conocido de la etapa en Morelia. Pues bien, para la nueva aventura en tierras sinaloenses el conjunto morado contrató a Juan Francisco Palencia, un entrenador de la nueva generación, con una experiencia más negativa que positiva de su paso por Pumas y Lobos BUAP.
Después de 13 jornadas, la apuesta fracasó y Mazatlán le dio las gracias a Paco. El cuadro mazatleco no perdió el tiempo y de inmediato se contactó con Tomás Boy, al que anunció el lunes. Sí, un técnico veterano que, si bien conoce al club de su etapa con Morelia, al que llevó a una Final en 2011, ese fue el último momento bueno para el Jefe, que desde entonces ha fungido más como un bombero, con estancias muy cortas.
LOS DE SIEMPRE
Hasta el momento, cinco entrenadores han sido cesados en el Guard1anes 2020, más el caso del español Míchel, quien dejó a Pumas a unos cuantos días del inicio de la temporada. De esta lista, cuatro equipos apostaron por entrenadores ya contrastados, mientras que dos le dieron la oportunidad a un nuevo técnico.
El primer técnico cesado fue Luis Fernando Tena de Chivas y en su lugar llegó Víctor Manuel Vucetich, uno de los entrenadores más veteranos y ganadores del futbol veterano, aunque su último logró fue la Copa MX de 2015 con Gallos Blancos. Nadie cuestiona la calidad de Vuce, incluso todos consideraron esta decisión como acertada. Hasta el momento tiene al equipo en puestos de repechaje, pero sin desplegar un buen futbol.
El segundo técnico cesado fue Rafael Puente del Río y en su lugar Atlas trajo al argentino Diego Cocca, quien ya dirigió en la Liga MX a Santos y Tijuana. El equipo se mantiene en la parte baja, pero cerca de los puestos de repechaje.
Luego Necaxa se sumó a la lista al despedir a Alfonso Sosa, contratando a José Guadalupe Cruz, un entrenador que en 2007 fue campeón con Atlante, pero cuya carrera ha venido a menos en los últimos años. Desde 2018 no dirigía en Primera División y ya se encontraba en la naciente Liga del Balompié Mexicana, cuando recibió esta nueva oportunidad.
Finalmente, Mazatlán apostó por un viejo conocido como Tomás Boy, cuyos últimos trabajos fueron malos en Cruz Azul y Chivas, incluso entre estos dos clubes estuvo más de dos años sin dirigir.
Sí, estos entrenadores pertenecen a la reducida baraja a la que siempre se recurre en la Liga MX.
LAS CARAS NUEVAS
La otra cara de la moneda la ejemplificaron Pumas y Toluca. Los universitarios se quedaron de manera inesperada sin técnico cuando Míchel renunció a unos días del comienzo del torneo.
Andrés Lillini, quien estaba en las fuerzas básicas, se hizo cargo del equipo, consiguiendo buenos resultados que propiciaron su ratificación cuando ya sonaban nombres como el de Marioni o Hugo Sánchez. Ha hecho un buen torneo y tiene al equipo en cuarto lugar, ya con un lugar en el repechaje, pero con el objetivo de calificar directo a la Liguilla.
Y el último caso es el de Toluca que ayer confirmó a Carlos Adrián Morales, quien fungía como asistente y tiene poco de haberse retirado. Debutó con triunfo y tiene la posibilidad de llevar a los Diablos a la repesca en su primera experiencia como técnico.
ZZM