El 11 de septiembre del 2001 el mundo se estremeció cuando se dio a conocer que las Torres Gemelas, edificios icónicos en Nueva York, habían sido el objetivo de un ataque terrorista gracias al secuestro de dos aviones.
Las imágenes de los dos aviones estrellándose contra las Torres son increíbles aún a 20 años. Estados Unidos, uno de los países más importantes del mundo, estaba lastimado y eso se reflejó con la inmediata suspensión de los deportes.
Tanto la NFL, MLB, así como otros deportes decidieron suspender inmediatamente sus jornadas por el miedo que se vivía entre la gente de Estados Unidos; sin embargo, la vida tenía que seguir y los deportes continuar, pero ¿Quién se iba a atrever a hacer un evento multitudinario tras un ataque terrorista?
La respuesta: Vince McMahon, el dueño de la WWE, se atrevió a realizar el primer evento deportivo tras el ataque terrorista del 9/11 en la ciudad de Houston, en el estado de Texas.
El ataque del 11-S ocurrió en martes, dos días después, la WWE celebró una edición más de SmackDown, siendo uno de los momentos más emotivos dentro del deporte estadunidense.
Un emotivo homenaje
Tan solo 48 horas después del ataque, con una nación aún herida, la promotora estadunidense realizó un evento multitudinario que estuvo lleno de emociones.
Con gente ondeando banderas en las gradas del coliseo, el evento empezó con todos los gladiadores bajando la rampa principal para poder escuchar un discurso que salió del corazón de Vince McMahon y que a la fecha sigue enchinando la piel.
“Hoy, el espíritu de Estados Unidos vive aquí, en Houston, Texas. Es el primer evento multitudinario desde la tragedia del martes. Somos personas orgullosas y orgullosas de nuestra nación”, fue parte del discurso dicho por el presidente de la WWE.
La gente presente en el coliseo empezó a corear “USA” mientras muchos agitaban banderas de Estados Unidos y otros tantos lloraban por la tragedia que estaba fresca y donde se perdieron aproximadamente 2 mil 996 vidas.
Lilian García, la anunciadora en esos tiempos, se encargó de cantar el himno nacional de los Estados Unidos, quien terminó llorando al finalizar la interpretación de la pieza.
Una curiosa coincidencia
El ataque a las Torres Gemelas fue atribuido a Osama Bin Laden, líder de Al Qaeda, quien fue asesinado el 2 de mayo del 2011 -1 de mayo en el hemisferio occidental-, por mera coincidencia la WWE estaba desarrollando un PPV llamado Extreme Rules.
John Cena fue el encargado de anunciar que los marines de Estados Unidos habían puesto fin a la vida del autor de una de las más grandes tragedias en la historia actual. El público, en contraste con el jueves 13 de septiembre del 2001, estalló en júbilo.
El grito patriótico de “USA” volvió a retumbar en la arena y al día siguiente en RAW, la WWE abrió el programa con el himno de Estados Unidos.
Se podría decir, de cierta manera, que la WWE estuvo presente en el ‘nacimiento’ de Bin Laden como terrorista internacional y cuando llegó a su fin.
EML