El pentatlón es para Mariana Arceo (Guadalajara, 1994) una parte importante de su vida, y ahora con mayor razón, ya que tiene claro un objetivo: hacer historia en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Pero fuera de los tatamis, en los pocos ratos libres que le quedan, la atleta realiza diferentes actividades, escribir su autobiografía o pasear a su mascota.
Hablando de su lado creativo, la jalisciense confiesa que de no haber sido deportista se hubiera inclinado por la música y habría sido compositora de baladas, y es que le gustaría que la gente se dé tiempo por escuchar este género pues, dice, las nuevas generaciones lo tienen un tanto relegado.
Cuando no se encuentra en competencia o durante una etapa de entrenamiento específico, Arceo se permite romper la dieta y comer todo tipo de antojos, como pizza, tacos y, como buena tapatía, tortas ahogadas. Sin embargo, tiene claro que al retomar sus entrenamientos deberá realizar algunos sacrificios en su vida para ir en busca de más sueños.
Mariana consiguió este año el oro en relevos femenil en el Campeonato Mundial de Budapest y el título individual en los Juegos Panamericanos de Lima, donde consiguió el pase individual para Tokio 2020, donde su objetivo es convertirse en la primera pentatleta mexicana que logra una medalla olímpica.
El primer pentatleta mexicano en subir al podio en una magna justa fue Ismael Hernández, al colgarse la presea de bronce en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
¿Qué hace Mariana Arceo cuando no práctica pentatlón?
Me encantan las mascotas. Tengo desde hace dos años un perrito que se llama Snoopy, a quien le dedico completamente mis ratos libres, ya que es una interacción demasiado especial la que tengo con él. Me encanta pasearlo en el parque; es un pastor suizo, muy travieso, le encanta subirse a los juegos de los parques. Creo que las personas que tienen un perrito deben ser conscientes de tener tiempo para sacarlos, y si no lo tengo yo, hay aplicaciones donde contratas gente para pasearlos y darles la atención que requieren.
¿Qué más te gusta hacer?
Me encanta comer de todo y cada que tengo una etapa de descanso lo aprovecho. Toda la comida me gusta, como tacos, sushi, pizza, pero también me inclino mucho por las tortas ahogadas de Jalisco, ya que yo soy de ese estado.
Y después de los antojitos, ¿qué hacer?
Ahorita que vienen los Juegos Olímpicos ya disfruté lo que tenía que disfrutar y ahora sí tenemos que aplicarnos y seguir las reglas; son 10 meses, pero siento que no son de sacrificio ya que te acostumbras, porque es lo que quieres hacer para alcanzar nuevas metas y sueños. Así que vienen 10 meses que van a estar rigurosamente cuidados, como la alimentación, los descansos y la preparación. El deportista tiene una diferente forma de vivir, pero se goza ese sufrimiento que se da en los entrenamientos; es algo muy positivo que a toda la gente que hace deporte le genera esa sensación.
Ahora para las fiestas decembrinas viene otro sacrificio…
La verdad, en esta temporada (de preparación) para Juegos Olímpicos sí vemos a nuestra familia, pero no somos como las demás personas que podemos festejar de manera normal en ese tipo de fechas o momentos, ya que tenemos un compromiso grande al ser deportistas, y ahorita más yo, pues ya estoy clasificada a Tokio.
¿Qué te hubiera gustado ser o hacer de no haberte dedicado a practicar deporte?
Me hubiera inclinado por la música. Me gusta mucho escribir, me desahogo de esa forma, y en algún momento sí me gustaría componer canciones y hacer que el pueblo regrese a sentir con la música romántica. Sé que ahorita se encuentran de moda géneros muy diferentes a los que se escuchaban antes. Me gustaría que la gente volviera a sentir la letra de las baladas, esa sería una de mis metas.
¿Actualmente escribes algo?
Sí, por ahora me dedico a una autobiografía, es uno de mis planes, espero algún día terminarla, pues lo veo como un plan para aportarle al deporte en México. Le he dedicado muchos años a este deporte y mi meta es algún día contar mi experiencia a nuevas generaciones. Es una autobiografía de cómo se vive del deporte desde que eres pequeña y todo el camino que debes recorrer para ser una buena deportista. Espero concluirla con un final feliz, y qué mejor que con una medalla olímpica.