En el deporte existen leyendas o mitos que ayudan a darle una cara más cercana al ámbito, y la lucha libre no es la excepción. En esta circunstancia los aficionados, así como los luchadores, se han encargado de crear la historia sobre la supuesta maldición del personaje Pentagón, ya que quien posee el nombre tiene un trágico desenlace.
Históricamente existieron múltiples versiones de este personaje; sin embargo, la mayoría de los casos han sufrido un penoso fin en sus carreras, marcando la reputación de la máscara en el ámbito.
El inicio
Primeramente, Pentagón fue encarnado originalmente por Jesús Andrade Salazar. En sus inicios fue uno de los luchadores con más talento en su localidad. El éxito pronto lo llevaron a la Arena México para probarse con las estrellas, donde más tarde Antonio Peña le ofreció fichar con Triple A.
De esta forma nació Pentagón, para ser el némesis de Octagón. Aunque los atuendos eran parecidos, se notaba una dicotomía de personalidades entre ambos gladiadores, incluso Jesús Salazar ganó más popularidad que su contrario.
A pesar de ello, en una función en Aguascalientes en 1996, sufrió un trágico accidente que le causó un paro cardiorrespiratorio sobre el ring, por lo que fue trasladado al hospital inmediatamente. Pasó semanas internado, incluso el luchador cuenta que estuvo a punto de quedar paralítico. Pese a sanar y no sufrir secuelas, abandonó la lucha libre para siempre.
Una segunda personalidad
Más tarde, cuando Salazar se retiró de los encordados, Triple A inmediatamente pensó en darle el personaje a otro luchador: Joe Mercado. Con experiencia en el ámbito, el ahora Pentagón II volvió a acaparar la atención del público gracias a su talento con el micrófono y sus habilidades luchísticas.
Esta versión fue la que más duró en la empresa, sin embargo, paulatinamente el luchador fue perdiendo estelaridad en AAA y se salió en malos términos. Si bien continuó luchando en Japón, México y algunas veces en Estados Unidos, su carrera no dio para más y se retiró de los encordados para dedicarse a la industria petrolera en Houston, Texas. Actualmente está casado con la ex luchadora Xóchitl Hamada.
El que fue desenmascarado
Tras la partida de Mercado de Triple A, nuevamente la administración buscó a un heredero para ocupar la máscara. En esta ocasión, Ricardo Moreno Antonio portó el nombre y él fue quien tuvo una rivalidad más desarrollada ante Octagón. En Triplemanía X, en una lucha de apuestas, cayó su máscara ante su némesis.
Esto fue un punto de partida para que el atleta sufriera un declive en su carrera. En años recientes fue visto en una función usando la máscara del personaje, bajo el sello de Pentagón X, empero los aficionados reaccionaron negativamente debido a que ya había perdido su tapa años atrás.
La versión mini
En Triple A las versiones mini de las máximas estrellas tomaron popularidad, por consiguiente nació la idea de tener un Pentagoncito en el plantel y en 1995 nació el personaje. Ese mismo año, desafortunadamente, fue acusado por homicidio para más tarde ser encarcelado.
En algunas entrevistas, el luchador ha explicado que lo acusaron de forma injusta, pero su nulo conocimiento sobre el proceso jurídico trajo como consecuencia su encierro por 18 años. En cambio, dentro del reclusorio impartió clases de lucha y acondicionamiento físico, aportando un poco de su conocimiento a la sociedad. Más tarde salió libre y continuó luchando de forma independiente.
¿Nueva víctima?
En 2013 en el evento Guerra de Titanes apareció una nueva versión: Pentagón Jr. Si bien muchos le platicaron sobre la supuesta maldición, siempre se mantuvo al margen diciendo que no le importaba, y gracias a ello nació la frase Cero Miedo.
Años más tarde salió de Triple A para participar en la escena independiente. Con el nombre de Penta el 0M (para evitar problemas legales), se convirtió en uno de los mexicanos con mayor prestigio en el medio. Actualmente regresó a la Tres Veces Estelar y también sale frecuentemente en la empresa AEW en Estados Unidos.
RGS