La segunda jornada del Grupo G del Mundial de Rusia 2018 ofreció el choque entre Bélgica, quien en su debut venció a Panamá por 3-0, y Túnez, equipo que dejó buenas sensaciones, a pesar de su derrota Inglaterra por 1-2.
El partido dio muchas oportunidades para ambas escuadras desde un inicio, muchas de ellas derivadas de las desconcentraciones defensivas; al minuto 3, tras una falta de Ben Youssef, Eden Hazard comenzó su gran participación en este duelo firmando, desde los once pasos, el primer tanto del partido. Posteriormente, al 16, Lukaku, aprovechando la recuperación de Meunier, además de la combinación entre Hazard y de Bruyne, puso el 2-0.
No obstante, la respuesta de los africanos no tardo; al 18', en un tiro libre que cayó en el área, Bronn, quien cuatro minutos más tarde saldría del partido por lesión, puso el 2-1. Ante esto, las Águilas de Catargo presionaron y empujaron por el empate, pero sus intentos fueron buen contenidos por la zaga y por Courtois.
A unos cuantos segundos de finalizar la primera mitad, Romelu Lukaku volvió a hacerse presente, colocando el tercer tanto. Al arranque del complemento, la gran asociación entre Hazard y De Bruyne siguió dando sus frutos, esta vez en el cuarto gol, firmado por el futbolista del Cheslea, quien aprovechó un excelente servició de su compañero, quien milita en el Manchester City.
Los belgas continuaron dominando el juego; ya con el 4-1 en su favor, Roberto Martínez decidió a mover sus piezas; una de esos ingresos fue el de Batshuayi, el jugador del Borussia Dortmund, quien después de muchos intentos clavó, al 89', el quinto de los Diablos Rojos. En el descuento, Khazri colocó el segundo para la escuadra tunecina, para el 5-2 definitivo.
Con este triunfo, Bélgica amarró su pase a los Octavos de Final, únicamente a la espera del resultado entre Panamá e Inglaterra; lo más probable es que este equipo se debata el primer lugar del sector ante los británicos en la última fecha del sector.