Los 'Faraones' de Egipto, liderados por el delantero estrella del Liverpool inglés Mohamed Salah, aterrizaron este domingo en Grozny, para tomar parte en el Mundial 2018 de Rusia, su primera participación en la Copa del Mundo después de 28 años.
La selección egipcia, siete veces campeona de África, establecerá su cuartel general en Grozny, capital de Chechenia, y jugará su primer partido el viernes 15 de junio contra Uruguay (Grupo A). El 19 de junio, se enfrentará a la anfitriona Rusia y el 25 a Arabia Saudí.
Se trata de la tercera participación de Egipto en un Mundial. "El equipo está preparado para la competición y la moral está alta", declaró a la AFP el director de la selección Ihab Leheta, en el aeropuerto internacional de Grozny.
Salah, que ha protagonizado una sensacional temporada con el Liverpool y ha permitido a Egipto clasificarse para el Mundial, se lesionó en el hombro el 26 de mayo durante la final de la Champions League contra el Real Madrid (con derrota inglesa por 3-1). Su lesión suscitó la inquietud de los aficionados que temen que su atacante estrella no pueda jugar en Rusia.
En una declaración televisada el sábado por la noche, el médico de los 'Faraones', Mohamed Abou al-Ala, afirmó que la decisión sobre la participación de Salah en el primer partido será tomada "en los dos próximos días". "No se le hará jugar si no está totalmente recuperado", añadió.
Cuestionado sobre el primer partido después del ayuno del Ramadán realizado por los jugadores (que termina este próximo jueves o viernes), apuntó que "físicamente podría no ser fácil, pero es necesario adaptarse".