En la primer semifinal del Abierto Mexicano 2019, Alexander Zverev, segundo sembrado del torneo, amarró su boleto a la gran final tras derrotar con parciales de 7-6 (0) y 6-3 en la pista del Estadio Pegaso.
Durante el primer set, el balance del británico permitió una igualdad constante en el partido, con apenas una diferencia de 2% en el servicio inaugural entre ambos, Zverev repitió la tónica de su encuentro de cuartos de final ante Alex de Minaur y el tiebreak se convirtió en el escenario para decantar el primer parcial de la noche, donde, contrario a lo visto en la pista del Estadio Pegaso, Chuck Norrie no pudo hacerle frente al alemán, quien se llevó el bloque con siete puntos consecutivos.
El segundo bloque, más parecido al desempate, tuvo a un Zverev más atlético en el campo, agresivo con la raqueta y le bastaron apenas nueve partidos para alcanzar su primer boleto a la final del Abierto Mexicano, gracias . En su historial, éste es el décimo sexto juego definitorio de su carrera, con un récord de 10 ganados y cinco perdidos. En cuestión de puntos de quiebre, el teutón lució impecable, con dos conversiones en mismo número de intentos, mientras que Norrie se quedó con uno en par de ocasiones.
Una de las claves fueron los servicios, donde la diferencia lució muy marcada con 10 aces para el ganador, mientras que Cameron Norrie apenas pudo conseguir dos, mismo número de dobles faltas en su haber.
En conferencia de prensa, el alemán, quien también está buscando un espacio en el último duelo de la categoría de dobles, donde participa con su hermano Mischa: “Esta ha sido una semana muy especial para mí. Es muy importante esta victoria. Hasta este punto no había jugado mucho tenis, lo he hecho lo mejor posible, he buscado descanso para estar listo, así que quiero estar lo mejor preparado y analizar y ver cómo puedo jugar para continuar en las dos categorías”.
Zverev, tercer mejor raqueta de la ATP espera al ganador de la final entre el australiano Nick Kyrgios y John Isner. Con el australiano tiene un récord global de tres victorias por mismo número de derrotas, siendo las últimas dos para el alemán: Copa Davis y el Masters 1000 de Miami, mientras que ante Isner, el finalista posee cinco de los seis triunfos en el historial entre ambos.