El español Rafael Nadal, número uno del mundo, pasó este domingo a cuartos de final en el Abierto de Estados Unidos al ganar en cuatro sets al georgiano Kikoloz Basilashvili, por 6-3, 6-3, 7-6 (6) y 6-4, y su próximo rival será el austríaco Dominic Thiem, número 9 de la ATP.
En un gran ambiente dominical en la pista central de Flushing Meadows, el Arthur Ashe Stadium, Nadal hizo un partido muy sólido, aprovechando los errores del rival y haciendo muy pocas concesiones. Sólo se le complicó el tercer set, que perdió en el 'tie break'.
Además, no hubo ni rastro de las molestias de rodilla de Nadal del partido del viernes pasado, en su duro duelo contra el ruso Karen Kchachanov.
Los primeros juegos del primer set ya pronosticaban un duelo competido, sobre todo por la seguridad que demostraba el georgiano ante la contundencia de Nadal.
Sin embargo, con un 4-3, Basilashvili no estuvo preciso y con el sol de cara cedió su primer saque, lo que Nadal aprovechó hasta seguir firme y ganar el primer set por un 6-3 al no desperdiciar la primera de las dos bolas de set que tuvo.
El georgiano bajó la guardia y Nadal le rompió el saque nada más empezar el segundo set, y el número uno del mundo puso tierra de por medio con un 2-0 que acabaría en un nuevo 6-3.
Nadal era solvente en su saque y llegó a subir en varias ocasiones a la red para finiquitar el set, mientras aprovechaba para no forzar cuando el georgiano tenía la iniciativa. Administraba sus fuerzas en un torneo de gran desgaste por las altas temperaturas.
El tercer set fue el más complicado para el español porque el georgiano no se quería ir de Flushing Meadows de cualquier forma, sobre todo porque su tenis era bueno, con un gran revés ganador y mucha potencia; muchos puntos los perdió por errores milimétricos.
Nadal no empezó bien y perdió el saque, si bien lo volvió a recuperar rápidamente. El español movía de lado a lado a Basilashvili, pero éste se resistía a dejar el 'US Open', con lo que el set se puso en un 6-5 con saque del georgiano.
El español, muy concentrado en todo momento, sabía que ese era un buen momento para acelerar. Pero el georgiano no dio su brazo a torcer y forzó el 'tie break', que perdió finalmente Nadal 6-8 tras desaprovechar una bola de partido.
Ese era un momento clave, aquellos en los que la moral baja. Sin embargo, Nadal se sobrepuso rápidamente ante un georgiano al que cada vez se le veía más fundido -se puso en cuclillas en más de una ocasión para descansar- por la alta humedad que reinaba en el Corona Park.
El número uno se puso serio y rompió el saque de Basilashvili nada más empezar el cuarto y, a la postre, último set. Un 2-0 que presagiaba que el set perdido quedaría en un susto para Nadal.
Aún así, la serie de reveses ganadores de Basilashvili llevó a Nadal a tener que echar el resto y tener que superar varias bolas de 'break' del georgiano, que seguía forzando la máquina para no despedirse de Nueva York. El 3-1 a favor de Nadal fue muy trabajado.
Tanto que Nadal volvió a sufrir y Basilashvili le rompió el saque hasta un igualado 3-3. Un set que pintaba cómodo para el español se complicó de nuevo.
Nadal sacó su raza habitual y fue él quien en el siguiente juego rompió el saque de Basilashvili, situándose en un 4-3 y luego en un 5-3 que psicológicamente por fin doblegó a un aguerrido georgiano, que cedió el partido con un último set de gran tenis con un 6-4 y un punto de partido para Nadal con uno de sus siete 'aces'.
En un par de días, el número uno del mundo se enfrentará al austríaco Dominic Thiem, noveno del ránking de la ATP, que se deshizo hoy del sudafricano Kevin Anderson en tres sets.