Club de niños y niñas en Ecatepec: arquitectura para transformar

Chic Haus

Planteado como un lugar que busca transformar la vida y el desarrollo integral de los niños, niñas y jóvenes de la región mediante espacios innovadores, llega este nuevo complejo a una comunidad en el Estado de México.

A manera de zoclo o rodapié se empleó un material cerámico con el objetivo de garantizar la durabilidad y resistencia de las fachadas al uso diario.
José Juan Garza
Ciudad de México /

Inspirado en el modelo de Boys and Girls of America con 150 años de exitosa formación de niños y jóvenes, se planteó este complejo destinado al Club De Niños Y Niñas, una iniciativa de gran potencial enfocada en la formación de jóvenes en situación de vulnerabilidad y riesgo social, donde se busca desarrollar su máximo potencial como ciudadanos en un ambiente sano y seguro. 

Ubicado en Ecatepec, Estado de México, este proyecto fue realizado por la firma CCA Centro De Colaboración Arquitectónica, a cargo de Ignacio Urquiza y Bernardo Quinzaños, en una extensión de 3,500 m2.

Este espacio resulta ideal para que los niños, niñas y jóvenes de entre los seis y 18 años descubran sus talentos y desarrollen habilidades. El programa del centro se basa en una metodología donde el crecimiento se enfoca en cinco pilares principales: arte, deporte, desarrollo humano, nutrición y habilidades para la vida. 

La intención es fomentar conductas sociales saludables y responsables mediante la realización de actividades constructivas y creativas para que los miembros del club se transformen en agentes de cambio en sus comunidades y se genere una mejor visión para el futuro. 

La propuesta arquitectónica explora los arquetipos de los elementos constructivos históricos y regionales, adaptándolos a una visión actual y contemporánea. Los arcos recuerdan a la arquitectura regional mexicana, mientras que los techos con dientes de sierra emulan la tendencia industrial. 

Vale la pena destacar que la selección de materiales se realizó de acuerdo con los recursos donados por diversas empresas y contribuyentes privados, por lo que el proyecto fue avanzando conforme al progreso de la obra en construcción. Sin embargo, se visualiza un lenguaje común donde los materiales expuestos y una paleta de colores neutra de grises permite mayor flexibilidad y adaptabilidad. 

El conjunto se integra como una composición que surge de la unión de diversos elementos y volúmenes que responden directamente a las necesidades de cada espacio, donde se genera una atmósfera dinámica que estimula el desarrollo de los pequeños y jóvenes.



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