La historia real de Richard Montañez, un mexicoamericano que empezó en el departamento de limpieza en la fábrica de Frito-Lay, y quien a través de la tenacidad y de ignorar los obstáculos que la sociedad le imponía logró cambiar el sabor de las botanas en el mundo entero, ya es una cinta.
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Eva Longoria dirige a Jesse García, Annie González y al gran Tony Shaloub en esta historia que se estrenó ayer en Star+ y que nos demuestra cómo las barreras se pueden derrumbar cuando hay familia, creatividad, sabores e identidad, una que no deja que el personaje se detenga ante nada. M2 platicó con Eva (EL) y con Jesse (JG), sobre esta cinta que deja a quien la vea con una sonrisa y con ganas de “picar” alguna buena botana.
Las historias protagonizadas por latinos que nos hacen sentir bien no se dan muy seguido, ¿por eso elegiste esta?
EL. No, no vienen seguido. Y no solo las películas sobre latinos, en general. Casi todo es oscuro y trata con ansiedad y estrés. Todas esas películas me hacen decir: “Yo no quiero ver esto”. Siempre quise hacer una cinta que nos haga sentir bien, cuando leí el script y la historia de Richard dije: “Ah, ¡es mexicoamericano como yo, ¿por qué no sabía eso? ¿Qué está pasando?”. Así que me obsesioné con esta historia, quería contarla. También me obsesioné con crear una historia que presentara la realidad de la vida de los mexicanos en Estados Unidos. Es un grupo de personas que trabajamos mucho. Se contribuye mucho a la sociedad, estamos enfocados en nuestras familias, tenemos sueños, estamos orientados a lograr nuestras metas, así que esta película también explora cuando esa oportunidad no es distribuida de manera equitativa.
¿Qué hay de esos sabores que sí hacen nuestra vida mejor? ¿También fue parte de las razón?
EL. Claro, porque también es parte de explicarle a otras comunidades quiénes somos. Esa era parte de la meta, la intención de hacer algo que sea auténtico. Eso incluye la comida, la religión, el racismo, el clasismo, todo con lo que se tuvieron que enfrentar en este camino.
Los sabores que nacen en esta historia están en el mundo entero.
EL. Es el snack número uno del mundo. Flamin’ Hot es una marca multimillonaria.
Jesse, Richard debe soportar cosas que no debería y lo hace porque tiene una visión más allá del momento, ¿cómo fue esa experiencia?
JG. Mucho de eso ya estaba en las páginas y había muchas cosas que yo quería hacer y otras que Eva quería; nos encontramos en el medio para lograrlo, aunque más del lado de ella (risas); he tenido muchas oportunidades y proyectos individuales pero nunca había tenido la oportunidad de hacer todo en una. Ella me dejó vivirlo de forma salvaje y me dejó descubrir cosas que no sabíamos, así que fue una oportunidad más allá de lo increíble.
¿Tuviste oportunidad de conocer al verdadero Richard Montañez, Jesse?
JG. Sí lo conocí por un par de horas breves antes de empezar a filmar, fue genial.
Claves
● La cinta fue mostrada por primera vez en el festival South by Southwest antes de llegar al streaming.
● Está basada en el libro de Montañez El niño, el burrito y la galleta: de conserje a ejecutivo.
● Los Montañez supieron que habían inventado el sabor perfecto cuando su hijo pequeño probó su mezcla de chiles y dijo: “Pica … pero rico”.