Inspirarse en el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para dar vida a la sátira de un magnate inmobiliario en Vicuña and the American Epilogue as Kurt Seaman, de la compañía Mosaic Theatre Company’s, significó “profundizar por cuatro meses en el lado oscuro, en el mundo de las mentiras, del bullying y los engaños”, explicó John de Lancie, actor de Star Trek y Breaking Bad.
“Pensé mucho representar a ese personaje porque profundizar en el lado oscuro cobra factura”, refirió el también director, productor, escritor y artista, quien estuvo en México como invitado en el encuentro la Ciudad de las Ideas.
De Lancie, conocido por sus papeles del Doctor Q, en Star Trek, y Donald Margolis, en Breaking Bad, admitió que estudiar a Trump, su personalidad y discurso le hizo ver el lado oscuro que tenemos todos los humanos.
¿Qué consecuencias le provocó interpretar a Donald Trump?
Después de un largo periodo de tiempo, en los ensayos, encuentras las características del personaje, en este caso hay situaciones muy abruptas: “no quiero escucharte”, “eres estúpido”, ese tipo de cosas. Y te das cuenta que eso también está dentro de ti, pero que no lo usas comúnmente.
Sin embargo, en los ensayos te exigen profundizar en ese lado oscuro. Después de unas 10 o 12 horas al día comienzas a ejercitar ese carácter y fluye más fácil. He desempeñado diversos personajes, algunos de ellos maravillosamente malvados y son gente de quienes aprendí, debido a que terminé siendo más tolerante. Pienso por ejemplo en el poeta Lord Byron, sentí un gran amor por él, así que me encontré a mí mismo, volviéndome más tranquilo.
Con Trump descubrí que me volví más abrupto. Eso es algo del efecto. La mayoría somos nosotros mismos en nuestra vida diaria, pero como actor buscas esa parte de ti mismo, que podría ser como la otra persona y comienzas a ejercitarla y sale a la superficie.
¿Meterse en el personaje de Trump lo enfermó?
No me sentí enfermo, pero sí ansioso, estaba al borde, como si el mundo me estuviera atacando y tuviera que responder. Mientras que en Breaking Bad, tenía un personaje (Donald Margolis) que se preocupaba tanto por su hija (Jane Margolis) y por lo que le pudiera pasar (durante el proceso de rehabilitación por heroína), que salieron esos sentimientos de preocuparme por el otro.
Con el otro personaje, el de Donald Trump, no practiqué ese tipo de atenciones, en lo absoluto, solo me enfocaba en aspectos como “¿qué tienes tú que quiera yo?”.
¿Teme que Trump se reelija?
Creo que sería terrible para nuestro país, estamos en un punto crucial y creo que justo como su personaje no es alguien a quien admiraría, que no respeto. Creo que en la política ya demostró de lo que es capaz. Ha causado revuelo en nuestro país y la idea de tener más de eso sería terrible.
¿Me podría contar sobre su papel en "Breaking Bad"?
Creo que mi personaje en Breaking Bad era un inocente en un mundo de muchas mentiras y yo solo estaba ahí porque quería cuidar a mi hija. Me pasó en una ocasión que un joven, de unos 25 años, se acercó a mí, puedes ver que tiene una vida dura y problemas de drogas y me dice: “¿Eres el papá de Jane?” Yo respondo sí. Entonces él dice: “Ahora sé lo que mis padres pasaban”, y eso te muestra el poder del teatro, porque a ese joven, sus padres y maestros le habían dicho miles de veces que estaba mal lo que hacía y solo viendo la serie pudo ser empático con el dolor de sus padres. Eso es lo mejor que el teatro hace.
¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre?
Bueno, digo esto no para que la gente sienta lástima, sino para los jóvenes puedan encontrar un camino. Soy disléxico, pero cuando era niño a eso le llamaban ser perezoso o medianamente retrasado, lo cual era dañino, no era bueno en la escuela. La actuación me salvó, por eso me gusta. Cuando tenía 14 interpreté a Henry V y por primera vez en mi vida fui bueno en algo y comencé a tomar riesgos.
Una de mis pasiones es navegar, tengo un bote y he navegado desde Los Ángeles hasta Tahití y de regreso, disfruto mucho hacerlo.
¿Qué disfruta más de la vida?
Me encanta comer, los tacos. Vivo en Los Ángeles y hay lugares de comida mexicana fantásticos. Voy a estar en México unos días, nunca había estado en Ciudad de México y la verdad es todo un viaje culinario. Vamos a probar comida callejera y después de restaurantes. Si ves mi teléfono, vas a ver muchas fotos de comida.
También disfruto escribir discursos. Estoy escribiendo una obra de política, me aseguro de que el Estado y la religión estén separados. No tengo ningún problema con lo que la gente cree o no, pero cuando una parte dice “esto es lo que yo creo y ahora los demás lo tienen que creer” sí tengo problemas con eso.
¿El papel en "Star Trek" es el más entrañable?
Creo que representa ser parte de una comunidad, que es como una casa creada por Gene Roddenberry a la cual millones de personas han entrado y están interesados en la ciencia; personalmente ha sido fantástico porque vengo aquí y la gente me reconoce. Pero la mejor parte es que soy parte de una comunidad que quiere que el mundo sea mejor, y de eso se trata Star Trek.
¿Es posible?
Completamente, estar aquí (en Puebla) es una prueba. Esta experiencia me conmovió. Ver y platicar con una audiencia de 17 o 22 años es grandioso. Eso alberga esperanzas de un futuro mejor.