En los años 80 uno de los conductores más famosos y con más prestigio en México fue Raúl Velasco, quien en Siempre en Domingo presentaba a los artistas del momento y era sabido que si algo no le parecía se lo decía en vivo a los famosos. Por otra parte, Marco Antonio Regil saltó a la fama en los años 90 y consolidó una carrera como conductor de 100 mexicanos dijeron, entre otros.
Marco Antonio Regil comenzó su carrera conduciendo concursos y fue en uno de ellos cuando coincidió con Raúl Velasco, ya que acudió a ese programa para apoyar a su hija Karina Velasco.
Regil asistió como invitado a Pinky Promise en donde recordó la ocasión en que conoció a Raúl Velasco, quien lo hizo llorar por unas palabras que le dijo tras cometer un error.
El famoso relató que en una ocasión condujo la semifinal de un intercolegial de baile en donde participó la hija de Raúl Velasco. Al llegar el día de la final, el conductor de Siempre en Domingo asistió al evento.
“Raúl Velasco iba como público y el productor del evento me dijo: ‘Va a venir Raúl Velasco, en algún momento hay que presentarlo’. Yo nervioso, temblando y el público era un desastre. Sale Karina, baila con su equipo y me dicen: ‘Ahorita presenta a Raúl Velasco’ (…), empiezo a decir y la esposa de Raúl y Raúl que estaban en las primeras filas me empiezan a hacer así (señas) y yo tenía que presentarlo, tenía 23 años de Tijuana, me dice que no y yo me seguí”.
Después de presentarlo se dio cuenta que había cometido un error porque la mayoría del público comenzó a abuchearlo. Tras esto, el conductor se sintió mal por lo que había hecho.
“El ochenta por ciento del teatro: ‘Bu y fuera Televisa’. Me hace él así como: ‘Te dije’ y me quedé petrificado (…), me acuerdo que dijo: ‘Vengo como papá’ y yo dije: ‘Viene como papá’. Se levanta don Raúl y se sale del escenario y yo me voy para atrás deprimido: ‘¿Qué hice?’”.
Después de lo sucedió, le informaron a Marco Antonio Regil que Raúl Velasco lo estaba buscando, algo que le generó miedo y preocupación porque pensó que su carrera se había acabado, sin embargo, las palabras que le dijo Velasco lo reconfortaron y lo hicieron llorar.
“Le digo a don Raúl: ‘Perdón’ y él me dice: ‘No vengo a regañarte, vengo a decirte que estés tranquilo, cometiste un error. ¿De dónde eres? Porque tienes acento (…), este no es mi público, este el público más grosero de México y les vale Televisa y yo vengo como papá a ver a mi hija (…), estás muy verde, pero vengo a decirte que eres muy bueno y quiero que sepas que te voy a ayudar, te voy a dar una oportunidad en cuanto yo pueda’. Me dio un abrazo y ese momento fue confortante y lloré. Me lo cumplió”.
PJG