Lila Downs está estrenando su disco Al chile, un material que casi le llevó un año y que le representó “un gran reto” porque es la primera vez, dice con cierta picardía, que “me alineé con un productor”; sin embargo, el sonido que logró Camilo Lara al retomar la música de las bandas oaxaqueñas y la esencia que la distingue y que se mezcla a la perfección con sus invitados (Norah Jones y Gepe) en la producción musical, la tiene feliz.
El final de la historia, pues, es positivo, aunque hace unos meses, justo cuando estaba en el estudio de grabación, la incertidumbre por lograr su objetivo era grande y así lo compartió la cantante a M2 en un receso de la grabación.
Así que mientras los ingenieros oían y reoían el sonido ya captado, Lila suspiro, tomó un poco de agua, se acomodó en la salita contigua a la estudio de grabación y de inmediato confesó la emoción ante el disco que nacía.
“Estamos con mucho trabajo, cada proyecto que hacemos es un reto diferente. Y en esta ocasión más”, dijo la oaxaqueña, quien continuó explicando el por qué hacer mancuerna con Camilo Lara para la producción del disco que salió a la venta de manera paralela con el documental El son del chile frito (nombre de una de las canciones inéditas que forman parte del disco).
“En esta ocasión decidimos buscar un productor distinto, todos nuestros discos los hemos hecho entre Paul Cohen (su esposo) y yo, pero ahora quise hacer algo que tuviera que ver con la música del campo, las bandas de los pueblos, en parte también la nuestra, pero inspirada en ese sonido del elemento ritual y de la belleza de la música del pueblo, que puede ser menos sofisticada en algunos términos, pero en otros es más difícil; y precisamente por ese espíritu que tiene esa música representa un reto mayor, que decidimos compartir con Camilo”.
La idea de Lila era “conectar ese sonido con el corazón de la gente” y para lograrlo fue a su tierra en busca de los sonidos que la enorgullecen.
“Vamos a ir a Oaxaca y vamos a grabar con la bandas del pueblo, vamos a retomar todos esos elementos que la hacen única, que la enriquecen, que te tocan cada vez que la escuchas”, dijo Downs quien, con su equipo, captó la sensibilidad de los niños músicos en el Itsmo de Tehuantepec y en “mi Juchitán querido”, que ahora se perciben en algunos de los 11 temas, dos de ellos inéditos, que integran la producción que está estrenando; y cuyo arte hace amalgama perfecta al ofrecer un trabajo exclusivo realizado por el artista oaxaqueño Demián Flores (ganador de múltiples premios internacionales entre los que se incluye el Reconocimiento Mentes Quo + Discovery: Vanguardia del INBA) y que también contempla fotos realizadas por la fotógrafa Marcela Taboada, cuyo trabajo ha sido reconocido en Estados Unidos, Japón, Rusia y Dinamarca, entre otros.
En Al chile también suena el mariachi “porque tengo colaboración de músicos de diferentes lugares con los que ha trabajado Camilo, algunos temas vienen con influencias de mariachi, así que la vihuela y el guitarrón se harán presentes”, dijo al vislumbrar el material que desde hace unas semanas suena con el tema “Cariñito” y concentra la participación de La Sonora Tropicana, Banda Misteriosa de Oaxaca, Grupo Costa Azul (músicos del legendario Rigo Tovar), Banda de música de Juchitán del Cemxha y algunos músicos de la Costa Chica.
Además en el material tiene un dueto con Norah Jones que se materializó siguiendo la filosofía de Lila que aplica la cantante.
“La historia con ella es muy especial, Camilo tiene amistad con el mánager de Norah; y él le dijo que estaba haciendo un disco conmigo;entonces el mánager le comentó: ‘pues fíjate que ella me acaba de comentar hoy que tuvo un sueño, que cantaba con Lila un tema’. Entonces el dueto surgió como decimos en Oaxaca, más por la espiritualidad, que porque alguien lo decida, es por las bendiciones y los caminos por los que te lleva la vida”, dijo la cantante, quien en su producción se percibe como logró su objetivo al retomar la música tradicional de fiestas populares como la cumbia, la chilena, el sonidero y el merequetengue.
Mientras habla del disco que la emociona, no pierde detalle de su equipo de trabajo, de modo que se percata que es tiempo de volver al estudio. Pero antes de retomar su posición toma los instrumentos y da una muestra de su pasión por la música. Así salen unas notas que de inmediato combina con una estrofa del tema que, en ese momento, está grabando. El sentimiento se desborda y el público, escasamente una decena de personas, entre su equipo de trabajo y personal de su disquera, agradece con una ovación el avance que ofrece de manera exclusiva.
Una sonrisa se dibuja en su rostro tras agradecer el reconocimiento, que toma como presagio del futuro que le espera a la producción que también se grabó en Nueva York y que hoy ya es una realidad que le gusta, la emociona y la tiene feliz porque después de varios meses de detallarla con Camilo, logró “concentrar el sonido de su pueblo para compartirlo y tocar el corazón del público”.
En el estudio
Por varias semanas en julio de 2018 estuvo en el estudio creando el sonido del disco, que tiene 11 temas.
La inspiración
Puso la muestra y tomó los instrumentos para ejecutar la cumbia, la chilena y del sonidero que ofrece.
La mancuerna
Con Camilo Lara supervisó cada nota con tal de que el disco se convirtiera en la realidad que imaginó.