Un público conformado en su mayoría por adultos, padres y abuelos recibió con aplausos a Raphael cuando se mostró en el escenario a las 21:10 horas. Le acompañó una Orquesta Sinfónica cubriendo el espacio y con una pantalla grande al fondo. Fue recibido de pie por el público, gesto que agradeció.
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"Infinitos bailes" fue el tema de apertura evidenciando el juego de reflectores y las animaciones que ilustraría en cada canción con elementos alusivos en la pantalla. Las primeras notas en piano dieron la bienvenida a "Igual (Loco por cantar)".
"Aunque a veces duela" tuvo además de la orquesta una guitarra eléctrica combinando de manera precisa. "Inmensidad" mostró acercamientos del cantante en las pantallas y evidenció el tono melodramático que le caracteriza y en la cual al final se dio un espacio para recibir la lluvia de aplausos y compartirlo con la orquesta.
"No vuelvas" tomó nueva vida con esta adaptación convirtiéndolo en un tema épico y celebrado. No faltaron los gritos de las mujeres presentes y en "Digan lo que digan" la pantalla mostró al comienzo su imagen cuando joven y provocó gritos también. Esta versión se alimentó de percusiones que le dieron un ritmo ágil además de incluir un fragmento con el coro del público.
Las letras en pantalla anticiparon "Mi gran noche" incluso antes de que comenzara a cantar y en la cual además se puso a bailar. Después cambió a un tono más melancólico con "Los hombres lloran también" y "Volveré a nacer". "Ahora" y "Provocación" fueron los siguientes temas en ser ovacionados. "La noche" dio paso después al acordeón para presentar su versión del clásico de Carlos Gardel "Volver".
Antes de ella platicó con la audiencia al mostrar una radio antigua colocada sobre el piano en la cual se escuchó la voz del argentino antes que Raphael rindiera su homenaje a manera de dueto con ese recurso. "Malena" continuó los tangos para añadirse "Yo sigo siendo aquel" otros de sus temas emblemáticos. El ritmo cambió por algo bailable con "Estuve enamorado" que otorgó otro momento memorable y donde la orquesta se puso de pie para recibir los aplausos. "A que no te vas" y "Sí, pero no" se sumaron en esta ocasión en la cual tal vez por la solemnidad del evento no platicó mucho con la gente pero agradeció y sonrió en cada ocasión así como compartir una larga lista de canciones. "Adoro" de Armando Manzanero formó parte de la selección, la cual fue coreada al unísono por los asistentes. Lo mismo pasó con "Cuando tú no estás" que mantuvo la unidad entre sus seguidores.
"Estar enamorado" se escuchó y después el original de Violeta Parra "Gracias a la vida" acompañado solamente de una guitarra acústica y el estilo se mantuvo con "Que nadie sepa mi sufrir" y el éxito de Pedro Infante, "Fallaste corazón" que convirtió el momento en una fiesta mexicana. La orquesta continuó con "La quiero a morir" y en "En carne viva" se sumaron a punto de llegar a las dos horas del concierto.
La euforia aumentó llegando los minutos finales y con ello otra avalancha de éxitos como "Qué sabe nadie", "Yo soy aquel", "Escándalo", "Como yo te amo" y el gran cierre con "A mi manera". Raphael se mostró agradecido y la gente se llevó a casa otro cálido recuerdo de su visita.