En la primera temporada de la serie Proyecto Libro Azul, con la que History ha tenido un éxito espectacular, se hace una gran mezcla de hechos reales, como las investigaciones del doctor Allen Hynek sobre la existencia extraterrestre, con el hecho de que este episodio de la historia ocurría en los momentos más álgidos y peligrosos de la Guerra Fría.
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Aunque queda claro desde un principio que el escepticismo del capitán Michael Quinn, interpretado por Michael Malarkey, es una gran combinación con la fascinación científica del doctor Hynek, un personaje de la vida real, siempre hay una conspiración que plantea maravillosos obstáculos para averiguar la verdad.
Aidan Gillen, a quien seguro han visto en series como Game of Thrones, aquí el doctor Hynek, respondió ante esta pregunta: ¿Esto trata más con los tiempos después de la Guerra Fría o con la posibilidad de la vida más allá de nuestro planeta?
“Definitivamente es parte de este fenómeno, si lo quieres llamar así. El fenómeno de los UFO representa mucho de lo que pasó después de la Segunda Guerra Mundial. Muchos temores. Así que es una combinación de temores tanto posguerra como nucleares, los avances tecnológicos, la televisión, todo en uno”.
Ese era un momento histórico, si no similar al que estamos viviendo, sí con cuestionamientos en común. Gobierno. Realidad. Política y ciencia, explica Michael.
“Básicamente la discusión y trama se centra entre la posibilidad de los incuestionables avistamientos, documentados fielmente por periódicos e investigadores, fuesen seres de otro planeta o parte de la batalla entre los dos poderes del mundo que tantos temían terminara siendo el fin de la civilización.
“Como ocurre seguido, resulta que los gobiernos, o al menos algunas ramas de ellos, tienen mucho que ver con lo que la población sabe y lo que no. En este caso, siendo los tiempos que eran, Aidan no ve mucha diferencia en la intención, aunque sí en las realidades y acceso a la información”, destaca.
“Creo que a los gobiernos siempre les conviene tener a su gente un poco asustada de algo y eso siempre ha sido el caso a través de la historia, ya sea una amenaza real o imaginaria. Creo que las cosas no son muy distintas ahora de lo que eran en 1953”.
Aunque estas entrevistas se hicieron antes de que imagináramos que una pandemia se avecinaba, los cuestionamientos que hace la serie le preocupaban a Michael desde entonces: “Me parece que en ese entonces (los años 50) había un poco más de credibilidad hacia lo que el gobierno estaba haciendo, el poder ayudar, ¿quién esta manejando todo? Y si en realidad son competentes o no. Creo que de eso se trata ahora. La gente se empieza a despertar. Pero por el otro lado eso está pasando ahora también, así que en cierta forma siento que la historia se está repitiendo”.
Michael no olvida la fascinación del tema que atrajo a tantos a la primera temporada: “Sí, creo que te diriges al hecho de que la gente comenzó a tener muchos más temores de lo que se topaban, de lo que venía de fuera. Y no creo que el gobierno estaba haciendo un buen trabajo de transmitir lo que estaba pasando, así que la gente estaba comenzando a inventar cosas. Con eso no quiero decir que los ovnis fueran inventados”.
Escrita como serie, basada en hechos reales, resulta muy interesante ver la forma en la que los fans absorben este contenido de History. Con la credibilidad del canal pero a sabiendas de que hay libertades creativas, eso le encanta a Michael: “Creo que es una de las cosas maravillosas del show. Está informando a mucha gente de cosas que posiblemente no sabían. Yo en lo particular solo sabía sobre los temas como Roswell y el Área 51, tal vez una que otra más, pero esto está iluminando un todo, esos casos de abducciones y es parte de nuestra historia”.
CLAVES
EL PRODUCTOR
La producción es de Robert Zemeckis, el mismo que nos trajo Volver al futuro, Contact y Forrest Gump.
NUEVA ENTREGA
Esta temporada se enfocará más en los sucesos, aún sin una respuesta oficial, del pueblo de Roswell y del Área 51.