El flujo de migrantes ha incrementado en los últimos meses en el municipio de Torreón, según cifras del Centro de Día para Migrantes 'Jesús Torres'. A finales de 2022 se registró una mayor cantidad de visitas, contabilizando hasta 600 personas en un mes que llegaron a dicho lugar.
Aunque María Concepción Martínez Rodríguez, coordinadora del centro no especificó a qué se debe esta afluencia, declaró que si es un aumento considerable, lo que significa mayor movilidad de parte de las personas.
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“Desde finales del año pasado ha ido incrementando el flujo al momento de llegar a tener el registro de más de 600 migrantes al mes, entonces eso si nos habla de que la gente sigue en movimiento y pues como que no va a parar”.
Alexis, Alan y Leonel son hondureños, hace un aproximadamente un mes que salieron de su país para buscar nuevas oportunidades, el jueves 25 de mayo llegaron a Torreón, y un día después tomaron el tren para ir a Monterrey.
Cuando llegaron a Torreón ya habían pedido referencias, en su trayecto por el país sufrieron robos y temían volver a pasar por algo así, por lo que buscaron información a través de internet para ver a qué se enfrentaban, “atrás de acá nos han robado, pero gracias a Dios vamos bien, nos dijeron que acá en Torreón estaba muy peligroso por la mafia, no sabemos, el ambiente se siente tenso porque no conocemos el lugar y no sabemos si de verdad hay peligro, nuestro miedo al llegar a cualquier lugar es que nos agarre migración y nos regrese, alguna mafia, que nos llegue a pasar algo en el tren, porque pasa”, señaló Alexis.
Durante su estancia en el municipio no presentaron ninguna queja por parte de las autoridades cuando aún se encontraban en camino para ir al Centro de Día lograron visualizar patrullas, sin embargo al llegar a la colonia Las Julietas, se dieron cuenta que la presencia de las autoridades cerca del lugar era nula.
Al llegar a Torreón ya sabían a donde asistir, a través de un celular investigaron sobre algún resguardo para migrantes y se toparon con el Centro de Día 'Jesús Torres' donde pasaron la noche junto con otras personas, hasta la mañana del viernes pudieron comer y asearse, para las 2:00 de la tarde, salieron de regreso a las vías para esperar el tren que los llevaría a Monterrey.
Un lugar de apoyo a donde llegar
El centro tiene la finalidad de ayudar a los migrantes para que su paso por la ciudad sea más llevadero, a punto de cumplir 12 años en el servicio a la gente, la casa ha visto pasar a miles de personas de distintas nacionalidades y edades, por lo que busca ser un lugar seguro en donde los migrantes puedan sentirse protegidos, situación que se ha visto complicada en algunas ocasiones debido a altercados con autoridades policiacas.
María Concepción aclaró que la policía debe cumplir con su papel primordial, que es el de proteger a las personas, por lo que ante problemáticas que se han generado en cuanto a los migrantes y la policía los llevó a participar en una mesa de diálogo.
Meses atrás, el centro colocó distintas quejas ante la Comisión de Derechos Humanos en Torreón, por abuso de autoridad en relación a los migrantes, la intención es que todos respeten el derecho de los extranjeros durante su estancia en el país.
Samuel Lozano de los Santos, párroco y director del centro, señaló que uno de esos derechos es el libre tránsito, “como derecho de los migrantes, la policía debe salvaguardar su seguridad, que es lo más importante”.
Trabajo humanitario; "apegarse a lo legal"
Por su parte, César Perales Esparza, director de Seguridad Pública Municipal (DSPM) en Torreón, confirmó que actualmente se está trabajando de la mano con el Centro de Día, y con el Instituto Nacional de Migración (INM), con la finalidad de realizar su trabajo desde el sentido humanitario.
“Como Policía Municipal estamos atentos ante cualquier requerimiento o apoyo que pueda necesitar el INM; se hizo una mesa de trabajo con el centro para migrantes para armonizar la acción humanitaria, que ellos desarrollan y nosotros cumplir con lo legal”.
Sin embargo, reiteró que la instrucción en cuanto a los migrantes son “rescates humanitarios”, lo que para ellos significa resguardar la seguridad de quienes se trasladan de un lugar a otro en condiciones inhumanas, por lo que aclaró que su trabajo como primeros respondientes es apegarse al marco legal.
aarp