Tras las imágenes difundidas en redes sociales del escurrimiento de aguas negras en la playa Icacos, en la bahía de Acapulco, el gobierno municipal, aseguró que eran aguas “estancadas”.
“Hoy podemos aseverar y asegurar que en ninguno de los 18 canales (pluviales) que Capama, tiene monitoreados, hay algún vertimiento de aguas negras. Del caso que nos ocupa, aseguramos que no hay vertimiento de aguas negras, ni crudas en este canal pluvial”, dijo el director del organismo operador del agua en Acapulco, Arturo Latabán López.
Prestadores de servicios turísticos aseguraron que el gobierno municipal abrió un canal y brotaron aguas crudas de negocios del área, con olores fétidos, lo cual publicaron en redes sociales.
Ante ello, el director de Capama, Arturo Lataban, negó que en esa zona hayan encontrado descargas de aguas clandestinas. Pero, admitió que solamente se vertieron mil 500 litros de hipoclorito de sodio.
“Estuvimos monitoreando, sí se trataba de que hubiera ahí, algún establecimiento algún condominio virtiendo (sic), a un canal pluvial, lo que no corresponde, pues deben estar conectados al canal hidrosanitario.
“Ya no encontramos ninguna toma, había mucha obscuridad, y no encontramos ningún negocio, ninguna casa-habitación, ningún condominio, y hotel que estuviera virtiendo aguas residuales”, explicó el director de ecología Jesús Castillo Aguirre.
ledz