El robo de hidrocarburos es una actividad que permanece en el estado de Puebla, ya que las autoridades federales y estatales han clausurado una toma clandestina por lo menos cada 32 horas, según datos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal.
Francisco Sánchez González, titular de la dependencia, indicó que del 1 de enero al 14 de diciembre de 2025 se han localizado e inhabilitado 261 puntos ilegales para la extracción de gas licuado de petróleo (LP), diésel o gasolina.
El funcionario añadió que durante ese periodo, que comprende el primer año de gobierno de Alejandro Armenta Mier, la SSP capturó a 162 personas relacionadas al huachicoleo en sus diferentes modalidades: extracción, traslado y comercialización.
Señaló que a lo largo del año, mediante intervención de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), la Secretaría de Marina (Semar), la Guardia Nacional, Petróleos Mexicanos y la Policía Estatal, se han incautado 2 millones 700 mil litros de combustible obtenido de manera irregular, los cuales quedaron a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR).
Sánchez resaltó el operativo más reciente que las autoridades federales y estatales realizaron en Tepeaca, municipio enclavado en el llamado 'Triángulo Rojo', donde la extracción de hidrocarburos es una constante ante el interés del crimen organizado por comercializarlo en estaciones de gasolina y gas LP.
Al respecto, indicó que el despliegue de las fuerzas culminó con la recuperación de 82 mil litros de combustible robado y el aseguramiento de 25 vehículos cisterna, tres vehículos particulares y dos inmuebles, en los que se resguardaban los equipos.
En ese sentido, el gobernador Alejandro Armenta celebró los resultados obtenidos en el combate al huachicoleo porque le permitirá mantener buena relación con Pemex, quien a lo largo del año hizo tres donaciones de pétreos para la pavimentación de calles en Puebla capital.
El mandatario sostuvo que su gobierno será intolerante al delito y recordó que en gobiernos anteriores había colusión de mandos de la Policía Estatal y las municipales con los grupos involucrados.
CHM