Ante la falta de acatamiento al confinamiento, sana distancia y distanciamiento social emitidas por las autoridades de salud que ha provocado 176 casos positivos de covid-19 y 20 personas fallecidas en Nayarit, el gobernador Antonio Echevarría García ordenó endurecer las medidas.
En un mensaje difundido a través de redes sociales, Echevarría advirtió que, de seguir saliendo la gente a las calles, en unos días más, colapsará la capacidad hospitalaria, por lo que exigió a los 20 ayuntamientos aplicar el decreto de distanciamiento social y confinamiento, que indica que quien lo violente, será acreedor a sanciones administrativas y 72 horas de cárcel.
“La tendencia de la última semana es claramente a la alza, y coincide con la evidente relajación de las normas y medidas de aislamiento social. Cada vez más personas pasean por la calle en actividades no esenciales, esta conducta es inadmisible. Es mi responsabilidad advertir que, de seguir como hasta hoy en el masivo y terco reto a la muerte, observado desde el 30 de abril, en unos días más la capacidad hospitalaria colapsará y los servicios funerarios no tendrán la capacidad de abasto”, sentenció.
Echevarría indicó que, por dicha razón, todas las corporaciones policiacas en los municipios y estatal, estarán patrullando calles y avenidas para evitar se violente el confinamiento.
El ejecutivo estatal, además, reveló que, de los 166 casos positivos hasta el momento en el estado, el 42 por ciento corresponde a contagios de personal del IMSS.
“Prefiero ser juzgado por exagerar en las medidas de restricción a la movilidad, para salvar vidas, que llevar en mi conciencia el funesto legado de la muerte”.
RLO