Luego de que el gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, acusó que el gobierno de México abandonó las mesas de seguridad ante las críticas a la presencia de las fuerzas federales en las presas de la entidad, el delegado federal, Juan Carlos Loera de la Rosa, aclaró que la medida se tomó luego de que él fuera excluido de la Mesa de Seguridad del Estado.
“El gobernador Javier Corral Jurado me excluyó de la Mesa Estatal para la Construcción de la Paz hace unos días y, por tal motivo, el gobierno federal decidió hacer la Mesa solo con las autoridades federales representadas en Chihuahua a partir de este miércoles”, dijo.
Al concluir la Mesa de Seguridad que se dio este miércoles en Cuauhtémoc, Chihuahua, Loera de la Rosa, reprochó que ahora el mandatario estatal intente, con argumentos falsos, politizar el tema de la seguridad: "debe quedar muy claro que no me quedaré callado ante el ataque sistemático al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, de quien soy su representante en el estado de Chihuahua”, precisó.
Añadió que paralelamente, hay una campaña de rechazo a la Guardia Nacional en la región Centro-Sur del estado, precisamente en las presas, que señaló, es alimentada por intereses políticos y por actitudes violentas de parte de alcaldes y diputados locales y federales del PAN.
Explicó que es una incongruencia que el gobierno del estado diga que se retiró de la Mesa de Seguridad “al representante del Presidente de la República porque se le perdió la confianza, cuando en esos espacios se trabaja precisamente en un ambiente de confianza y confidencialidad.
“Fue el gobernador quien, hace un par de semanas, violentó esa confidencialidad, solicitando de manera pública que la Guardia Nacional moviera a sus elementos de una ciudad a otra, cuando para eso es la mesa, para tratar asuntos de extrema confidencialidad y estrategias que no deben ser públicas, y así habíamos venido trabajando durante los últimos 21 meses. Pero el gobernador decidió exhibir una actitud separatista, de descoordinación”, subrayó el llamado delegado.
Tras lo anterior, el funcionario federal se congratuló de que las mesas que se realizan en las 10 regiones en las que está dividido el estado, se estén llevando a cabo con normalidad y con la participación de los representes de los municipios, el estado y la federación.
"Hago un llamado al ciudadano gobernador del estado (Javier Corral Jurado) para que continúen los trabajos en esas mesas regionales, porque están funcionando, atendiendo las causas de la violencia con estrategias territoriales”, indicó.
Por ello, consideró como un “error” mezclar un asunto político que nada tiene qué ver con el tema de la seguridad en la estrategia de las mesas para la Construcción de la paz, porque sería en perjuicio de los ciudadanos de nuestro estado.
Recordó que el primer acuerdo que se generó en la Mesa Estatal para la Construcción de la Paz, “es que tiene que ser un órgano totalmente despolitizado y así es como había estado funcionando”, hasta que el gobernador decidió excluirlo de participar en ellas, refirió.
Loera de la Rosa señaló que el disenso entre ambas esferas de gobierno por el tema del conflicto del agua, el que es un asunto altamente politizado y en el cual debería de haber más solidaridad de parte del gobierno estatal y de los gobiernos municipales con el gobierno federal, no debe extenderse al tema de seguridad, dijo.
Por último, dijo confiar en que habrá un cambio de opinión por parte del Gobierno del Estado para que se pueda recomponer la Mesa de Seguridad y mantener las acciones coordinadas entre todos los órdenes de gobierno, en beneficio de los chihuahuenses.
RLO