Siete lugares en México para celebrar el Día de Muertos

Oaxaca, Veracruz, Puebla, Campeche, Yucatán, Michoacán y Aguascalientes son algunos de los estados más emblemáticos para celebrar el Día de Muertos, tradición nombrada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

El Día de Muertos, dentro de la cosmovisión indígena, es el retorno de las almas de los difuntos. (Cuartoscuro/Archivo)
y Óscar Rodríguez
Ciudad de México /

Conforme se acerca noviembre, el olor a flor de cempasúchil y pan de muerto comienza a hacerse presente anunciando el Día de Muertos.

​El Día de Muertos es una tradición en México tan importante que incluso la Unesco la nombró como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2018.

Es por eso que si tienes ganas de celebrar esta fiesta de una manera diferente, te presentamos siete lugares en los que puedes hacerlo.

Hanal Pixán en Yucatán

La influencia de la cultura maya en Yucatán es innegable y es tan profunda que incluso una tradición como el Día de Muertos es diferente y hasta recibe un nombre diferente.

El primer día del Hanal Pixán, o comida de las ánimas, se dedica a los niños y le llaman hanal palal. El segundo día, 1 de noviembre, está dedicado a los adultos muertos y le llaman hanal nucuch uinicoob, y el tercer día es el hanal pixanoob llamado en algunos lugares misa pixán, porque ese día se aplica una misa dedicada a las ánimas, por lo general en el cementerio de la población.

Según el gobierno del estado, la tradición incluye varios ritos, pero el principal consiste en poner una mesa que funciona como altar, alumbrada con veladoras, debajo de los árboles del patio y cerca de las sepulturas de los familiares, donde se coloca comida típica de la temporada; todo eso adornado con veladoras, flores, ramas de ruda y las fotografías de las personas fallecidas", explica el gobierno del estado.

Pomuch, Campeche

Los habitantes del poblado de Pomuch, ubicado en el municipio de Hecelchakán, Campeche, también tienen un ritual diferente para celebrar el Día de Muertos y recordar a sus familiares.

Los primeros dos días de noviembre, pobladores limpian y acomodan los huesos de sus seres queridos mientras les rezan, les cantan o simplemente platican con ellos.

Aunque parece un ritual muy personal, cientos de visitantes llegan todos los años al panteón de Pomuch para apreciar la limpieza de huesos.

Oaxaca

Oaxaca es un estado tan arraigado a sus tradiciones y raíces que no podía quedarse fuera de este listado.

Este año, las autoridades anunciaron la realización de alrededor de 300 eventos en toda la entidad encabezados por la instalación de un altar de muertos en el Museo Estatal de Arte Popular ubicado en San Bartolo Coyotepec.

También se realizará la feria del pan y el chocolate y una mega comparsa en la capital de la entidad, entre otras actividades.

Pátzcuaro, Michoacán

Pátzcuaro y la Isla de Janitzio son dos lugares de Michoacán que han cobrado relevancia por sus festejos del Día de Muertos.

Durante el 1 de noviembre los pobladores colocan ofrendas sobre las tumbas de sus seres queridos y esperan su llegada a la luz de las velas.

Aguascalientes

Desde 1994 en Aguascalientes se realiza el Festival Cultural de las Calaveras para celebrar el Día de Muertos.

Del 25 de octubre al 3 de noviembre en la ciudad se realizan diferentes actividades que incluyen conciertos todos los días, festivales de comida, artesanías que son enmarcadas por el desfile de calaveras, que se realiza el 1 de noviembre.

Veracruz

El Día de Muertos o Xantolo es una de las festividades más importantes y representativas de la región norte de Veracruz, comprendida, entre otras, por las poblaciones de Pánuco, Tempoal, Tantoyuca, Platón Sánchez y El Higo.

Se realiza una representación con los habitantes disfrazados de viejos con máscaras artesanales, talladas en madera y atuendos de estilo vaquero. También usan un paliacate o una pañoleta para cubrir la parte posterior del cráneo y el cuello mismo.

Chinahuapan, Puebla

Chinahuapan está en la Sierra Norte de Puebla y en esos días reúne multitudes alrededor de su mítica laguna ubicada en el centro del pueblo. Ahí se lleva a cabo el 1 de noviembre el Festival de la Luz y la Vida, evento acompañado de luces fluorescentes, actores, balsas, una pirámide flotante custodiada por calaveras y fuegos artificiales que narran la travesía de los muertos.

RLO/ledz

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