Habitantes del ejido La Luz en Lerdo, acudieron a la presidencia municipal para exigirle a la alcaldesa, María Luisa González Achem una explicación por la suspensión de los trabajos en una noria que los tiene sin agua.
Dolores Luévanos Meza, encabezó el grupo de aproximadamente 15 mujeres y dijo que la principal preocupación, es que esta Administración Municipal está por concluir y temen que el pozo de agua no lo terminen.
“Es más lo que suspenden, que lo que trabajan, si van y trabajan es dos o tres días y suspenden hasa quince días”.
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La entrega de la noria debió ser desde agosto del año pasado, pero a estas fechas los habitantes de La Luz, deben conformarse con las pipas que el SAPAL les hace llegar.
Para algunas familias la situación es más complicada, debido a que por sus dimensiones y condiciones no puede ingresar a zonas del cerro en donde hay viviendas, por lo cual deben caminar hasta 20 kilómetros para obtener agua.
“Ahorita el rancho está completamente muerto, no hay agua, que estamos esperando, que haya una epidemia”.
Son alrededor de 800 habitantes del ejido La Luz, afectando a otras localidades como Rancho Güero y La Goleta, quienes también recibirán el beneficio de la noria.
Ante las quejas de los habitantes del Ejido La Luz, María Luisa González Achem, informó que no existe retraso en la construcción de la noria por la empresa Delfín, sino que ocurrió un imprevisto en el subsuelo.
El estudio geológico que hicieron les dio un punto en donde había agua, sin embargo, al llegar a una perforación de 50 metros.
Aunque detectaron el recurso las condiciones del suelo ocasionaron un derrumbe, por lo cual tuvieron que cambiar de zona, en donde pudieron continuar la excavación que llegó a 300 metros de profundidad.
Será Luego de dos días que esperan el inicio de operación.
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