A nivel mundial se ha registrado un incremento en las temperaturas máximas, lidiar con el calor se convirtió en un reto y ello tiene que ver con un fenómeno conocido como El Niño. Aquí te contamos los detalles.
Este evento marcará el clima de este año, pues se prevé que impacte en las temperaturas máximas, en la posibilidad de sequías e incluso la probabilidad de huracanes, de acuerdo con la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés).
'El Niño' está aquí: NOAA
La semana pasada se anunció la llegada de El Niño y se pronosticó que sus condiciones se fortalecerán gradualmente en el invierno. Hay altas probabilidades de que se presente un evento fuerte y promueva afectaciones en las temperaturas en el mundo.
"El Niño es un fenómeno climático natural marcado por temperaturas de la superficie del mar más cálidas que el promedio en el Océano Pacífico central y oriental cerca del ecuador, que ocurre en promedio cada dos a siete años. Los impactos de El Niño en el clima se extienden mucho más allá del Océano Pacífico", indicó la dependencia estadunidense en un comunicado.
Récords de temperaturas en 2023
Un evento de El Niño más fuerte implica que hay mayor probabilidad de que la temperatura global, la lluvia y otros patrones presenten alteraciones.
Puede "(...) aumentar el riesgo de fuertes lluvias y sequías en ciertos lugares del mundo (...). "El Niño podría generar nuevos récords de temperatura, particularmente en áreas que ya experimentan temperaturas superiores al promedio", indicó Michelle L'Heureux, científica climática del Centro de Predicción del Clima.
Efectos en la temporada de huracanes
El Niño llegó con uno o dos meses de anticipación y su presencia contribuyó a la perspectiva de huracanes en los océanos Pacífico y Atlántico de 2023.
Las condiciones de El Niño generalmente ayudan a disminuir la actividad de los huracanes en el Atlántico, mientras que generalmente favorece una fuerte actividad de huracanes en el Pacífico central y oriental.
Para este año habrá hasta 30 por ciento más actividad ciclónica de lo habitual en el Pacífico, mientras que en el Atlántico la temporada se espera entre normal y hasta un diez por ciento menor, de acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
ROA