Los restos de una mujer de 34 años, exhumado junto con otros 116 cuerpos de las fosas irregulares de Tetelcingo en 2016, finalmente fue entregada a sus familiares la mañana de hoy en ese municipio, ubicado al oriente de Morelos.
Maricruz “N”, oriunda de Jonacatepec, se convirtió en el cuerpo número once que es extraído de las fosas del panteón ministerial Jardines del Recuerdo, a donde fueron llevados todos los restos de las fosas de Tetelcingo, cuyo descubrimiento sobrevino cuando la familia de Oliver Wenceslao Navarrete Hernández, documentó en video la exhumación de su familiar de una fosa común, de donde salía cuerpo tras cuerpo.
Alrededor de las ocho de la mañana, personal de la Fiscalía General del estado (FGE) y de la Fiscalía Especializada en Desaparición Forzada (FEDF) llegaron al panteón donde ya estaba la familia de Maricruz, para proceder a la entrega de los restos. Fue la propia familia de la víctima la que solicitó que en el acto no hubieran mas personas que los familiares y los funcionarios. Tampoco se permitió el acceso a los medios de comunicación.
“Es un trabajo que estamos haciendo d manera transparente. Quiero comentarles que los familiares, para esta entrega, nos pidieron que no hubiera nadie fuera de la familia, y ese es un derecho que tienen”, apuntó el titular de la FGE, Uriel Carmona Gándara.
"Al concluirse los trabajos de identificación humana y confronta genética, cumpliendo con el informe integrado y dictamen realizado por peritos en la materia, la Comisión Nacional de Derechos Humanos analizó y avaló el procedimiento correspondiente para formalizar la entrega de los restos a familiares, no obstante lo anterior y para dar certeza a familiares sobre la identidad, la Fiscalía General del Estado de Morelos, realizó un dictamen integral con el análisis de todos los dictámenes que obran en la carpeta de investigación para lograr la plena identificación de la víctima”, destacó la dependencia en un comunicado.
De acuerdo con información oficial, durante el proceso de identificación y búsqueda de familiares, se contó con la participación de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), hasta que concluyó el procedimiento con la confronta genética, lo que derivó en el procedimiento, avalado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y notificado a los familiares, obteniendo el reconocimiento de víctima directa y reconocidos los padres como víctimas indirectas.
Derivado de dicho reconocimiento, los familiares obtuvieron acceso a recursos provenientes de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) del Estado de Morelos, para la cobertura de los gastos relacionados con la exhumación, gastos funerarios y depósito final de los restos mortales cuyo número prevalece en 108 cuerpos aun sin ser entregados.
jamj