Luego de padecer el embate del crimen organizado y la falta de seguridad en la región serrana de Madera, Chihuahua, la empresa Panamerican Silver Corporation cerró la Mina de Dolores y dejó a más de mil 800 trabajadores sin sustento. El cierre se dio tras el hallazgo de un hombre decapitado que fue dejado en sus cercanías.
Ante esto, el fiscal general del Estado, César Peniche Espejel, dijo que "apenas ayer (jueves) se nos informó extraoficialmente de ciertas intimidaciones, por lo que era probable una suspensión de actividades".
El cierre, hasta ahora indefinido, no sorprendió a las autoridades municipales y de la población que “vive” de esta empresa, la cual, desde el año pasado ha padecido amenazas de los miembros del crimen organizado que operan en esta región.
Además, trascendió que los proveedores de la empresa dedicada a la exploración, explotación y comercialización de plata y oro, también sufrieron el acoso de los miembros del crimen organizado, quienes montaban retenes para intimidar a los mineros.
Al respecto, el titular de la Dirección de Minería del gobierno estatal, José Rafael Jabalera Batista, dijo que la empresa canadiense tomó esta decisión como una manera de prevención para su personal; sin embargo, especificó que el cierre no será en su totalidad.
Sin embargo, el funcionario desligó al crimen organizado como causa del cierre de la mina, al apuntar: “hubo un incidente con los contratistas de la mina y por eso decidió suspender operaciones y analizar la situación para tener un plan, no es sencillo para una mina cerrar de un día para otro, hay muchas situaciones que van a continuar ahí con vigilancia”.
Por su parte, Peniche dijo que se reunirá con la secretaria de Innovación y Desarrollo Económico, Alejandra de la Vega Arizpe, y directivos de la empresa para establecer las líneas de acción que coadyuven a optimizar las condiciones de seguridad en esa región.
“Ya se movilizó un contingente por parte de la Fiscalía General del Estado, así como de la Policía Federal y de la Secretaría de la Defensa Nacional con el objetivo de garantizar la seguridad en la zona”, anunció el titular de la fiscalía.
Tras lo anterior, la presidenta del Congreso del Estado, Diana Velázquez Ramírez, dijo que ante los hechos lamentables de inseguridad, es necesario que se aplique una estrategia contundente en los tres niveles de gobierno para combatir esta situación.
“Estoy segura que la mina tenía su buen número de trabajadores que vivían de eso junto con sus familias. El hecho que ya estén cerrando las instalaciones, es porque la inseguridad sigue de forma ascendente, nosotros como lo hemos dicho desde el principio, se debe de aplicar una estrategia contundente por parte de los tres niveles de gobierno”, indicó.
JOS