En Estados Unidos, una mujer fue arrestada después de que, supuestamente, encerró a su perro en un auto como castigo por haber atacado a otras mascotas. La policía acudió a rescatar al animal, pero lo encontró muerto.
Mouheb Ashakih, de 58 años originaria de Sandusky, Ohio, fue acusada por crueldad grave hacia los animales por haber encerrado a su mascota. La policía encontró a la mujer tras recibir la llamada de un vecino el sábado.
El vecino contó a la policía que vio cuando Ashakih puso al Pit Bull en un auto con las puertas y ventanas cerradas. El perro estuvo dentro del vehículo durante unos 20 minutos, con temperaturas de alrededor de los 27 grados centígrados, de acuerdo un informe policial.
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"El hombre dijo que observó al perro destrozando el interior del vehículo y parecía que quería salir. Se dio cuenta de que todas las ventanas estaban subidas y estaba preocupado por la seguridad del canino. Se acercó a la residencia y habló con Mouheb a través de la ventana", según el informe.
El vecino pidió a la mujer que dejara salir al perro, pero ella respondió "No, no me importa. Quiero que muera".
La policía fue a hablar con Ashakih, quien les dijo a los oficiales que puso a su perro en el asiento trasero del vehículo porque atacó a otra de sus mascotas. La mujer le dijo a la policía que tenía cuatro perros más dentro de su casa.
Luego, un oficial corrió hacia el carro y encontró al perro inmóvil, aunque no sabía si estaba desmayado o muerto.
"Mouheb comenzó a gritar al observar a su perro y nos suplicó que rompiéramos la ventana de su auto", agregó el informe.
La policía dijo que el perro estaba rígido y caliente cuando lo sacaron del carro, además, tenía las patas cortadas y sangrando. El interior del vehículo estaba cubierto de sangre, como si el Pit Bull hubiera intentado salir con desesperación.
"El animal luchó por su vida dentro del automóvil", dijo el jefe de policía Jared Oliver. "El perro intentó resistir dentro del auto, pero el calor lo venció. Es terrible".
Después de que Ashakih fue arrestada, hizo una serie de declaraciones que preocupó a las autoridades, por lo que fue enviada al Centro Médico Regional de Firelands para una evaluación mental.
Después de que fue absuelta, la sospechosa fue llevada de regreso a su casa, donde pudo sacar a las cuatro mascotas restantes de su casa, gracias al permiso de un guardián de perros del condado de Erie.
Se informó que Ashakih tendrá que comparecer ante la corte para enfrentar los cargos por la muerte del perro.
ROA