Para el señor Gabriel no existen las fiestas decembrinas, ya que solo vive al día y con el poco dinero que gana vendiendo algunos productos reciclables, solo le alcanza para algunos alimentos por lo que dice que solo espera recibir el siguiente año y con salud.
Con ayuda de una vieja carreola carga el poco cartón, botellas de plástico, aluminio y otros objetos que lleva al establecimiento de compra venta, donde si tiene suerte le pagan por ello de veinte a 25 pesos, ya que no logra recolectar mucho a diario.
Señala que la situación es crítica, ya que por sufrir de algunos dolores en sus extremidades inferiores no puede buscar algún tipo de empleo y el que realizaba como trabajador de la construcción, se le dificulta por su estado aunado a que encargados de obra se aprovechan y no les quieren pagar lo justo.
Por lo anterior tiene que buscar la manera de sobrevivir en su humilde domicilio que se ubica en la colonia El Focep de la ciudad de Gómez Palacio, Durango, donde en ocasiones algunos vecinos le regalan cosas para que las venda en el negocio de "chatarra".
Otra de las dificultades que enfrenta es que por lo poco que junta a diario, los encargados del negocio de compra venta no le reciben sus productos, ya que muchas de las veces no llega al peso de un kilogramo por lo que es rechazado.
Don Gabriel, de 58 años de edad, quien señaló que se separó de su esposa hace siete años por los problemas que enfrentaban como pareja, mencionó que son padres de tres mujeres y tres varones, pero ya hicieron su vida y no se frecuentan desde hace tiempo.
Sin ningún tipo de rencor Gabriel, indicó que lo único que quiere es que todos sus hijos se encuentren bien y puedan salir adelante, ya que en lo que a él se refiere seguirá luchando por salir adelante día con día, y vivir el próximo y los siguientes años, pese a los fuertes problemas económicos por lo que pasa.
"La navidad, año nuevo, mi cumpleaños es como cualquier otro día, ya que solo me preocupo en sobrevivir día con día, por lo que éste tipo de festejos que para la mayoría de la gente es época de reunión, fiestas, regalos, comidas, pasa desapercibido para mi y solo deseo que el creador me permita vivir un poco más".
Con su cansado caminar Gabriel, se retiró no sin antes desear que todo salga bien, para las personas, resaltando que en éste mundo cada quien vive como su destino lo tiene trazado y el que hoy pasa por dificultades y carencia, quizá en la otra vida todo será diferente por lo que nunca se debe perder la esperanza.
EGO