Luego de las lluvias registradas los primeros días de septiembre, el sistema de drenaje de Gómez Palacio se vio afectado en diferentes sectores de la ciudad.
Debido a la situación actual se cuestionó al director general del Sistema Descentralizado de Agua Potable y Alcantarillado (Sideapa), Francisco Javier Escalera Tostado, sobre las condiciones del drenaje que brinda el servicio en la ciudad.
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Destacó que muchas de las líneas están obsoletas, sin embargo se está trabajando en la reposición de algunos sectores.
En ese sentido informó que 80% del recurso, procedente del Ramo 33, en este año se destinó para la reposición de líneas del drenaje. El monto representa entre 8 a 9 millones de pesos, para alrededor de 10 obras, tanto para el drenaje sanitario y en menor medida para el pluvial.
Entre algunas que ya se llevaron a cabo son el drenaje pluvial de la colonia Carlos Herrera.
“Era una petición que tenían desde la administración pasada de la señora, (Leticia Herrera Ale) se acaba de cumplir esa promesa, la echamos andar hace unos treinta días y funcionó muy bien”.
En relación al drenaje sanitario también concluyeron con la reposición en la colonia Valle Azul, en donde se introdujeron 300 metros lineales de tubería de 12 pulgadas, con algunas descargas domiciliarias también. Y actualmente llevan a cabo la reposición de líneas de drenaje sanitario, así como otras de agua potable en el Fraccionamiento Santa Rosa.
Zona rural, 60% sin drenaje
El sector rural, por otro lado, es el que más rezago registra, pues entre los tres perímetros en que se divide como Lavín, Centro y Sacramento, 60% no cuenta con drenaje sanitario y aún utilizan fosas sépticas.
Luis Wiley Saade, director del Sideapa Rural, destacó que hay proyectos que ya están validados, sin embargo en lo que va de esta administración, la mayor parte del recurso federal se ha estado destinando para el proyecto de Agua Saludable para La Laguna.
Para solventar el rezago del drenaje en el área rural de Gómez Palacio, el Sideapa conformó un proyecto para brindar el servicio a las familias de las comunidades, el cual asciende a los 800 millones de pesos.
“Exclusivamente de drenaje”, dijo el director de Siadapa Rural.
Durante los días de lluvia, el panorama empeoró ya que el agua se acumuló en los caminos, y esto elevaba el riesgo a otro grave problema de salud, como la proliferación del mosco aedes aegypti, responsable del dengue. Debido a esta situación el sistema operador, acudió a los sectores y con el uso de motobombas estuvieron desaguando y despejando el área.
Los vecinos de Santa Rosa piden celeridad a las obras
En el Circuito Álamos, entre Paseo y Ramírez Leyva, del Fraccionamiento Santa Rosa, desde hace alrededor de tres semanas empezaron los trabajos de introducción de drenaje como uno de los proyectos establecidos con el ramo 33 de 2024, y aunque los vecinos ven con buenos ojos la obra, pues consideran que desde que se creó la colonia, hace más de dos décadas, no se había consolidado un proyecto similar, su preocupación es la tardanza de los trabajos.
Valentín Guerrero, vecino de hace aproximadamente 11 años del fraccionamiento, agregó que después de estar enfrentando fallas con el servicio de drenaje, el cambio será de gran beneficio para todos los vecinos del sector.
“Ya teníamos esa saturación de aguas negras y todo. Lo malo es que se tarda muchísimo tiempo y como puedes ver hay mucho desbarajuste, mucho desorden, sobre todo para los vecinos que tenemos coche, no tenemos donde estacionarlo. La obra en sí es muy buena, nos va a ayudar a la colonia bastante”.
Además de pedir a las autoridades celeridad en las obras, también los vecinos exigen que el trabajo se haga de calidad y al momento de concluir con la introducción de drenaje de manera inmediata empiecen con la pavimentación.
Por su parte, Carmen Torres, vecina del Circuito Los Álamos del Fraccionamiento Santa Rosa desde hace 22 años, manifestó preocupación ante la lentitud de los trabajos de introducción de un nuevo drenaje, sobre todo porque ella misma ha visto como los trabajadores del Sideapa permanecen sin hacer nada durante mucho tiempo, mientras que solamente una máquina está operando en esta calle.
Para la vecina de este sector habitacional, es un hecho que una vez que concluyan con los trabajos, las familias del sector serán las más beneficiadas pero el problema es el tiempo, pues hasta el momento no se observan avances. Y no solamente es ella, sino los vecinos cercanos que tienen problemas al no poder estacionar sus vehículos en sus cocheras.
La José Rebollo Acosta está en el olvido, dicen colonos
Mientras se llevan a cabo diferentes obras de introducción de líneas de drenaje nuevo en diferentes sectores habitacionales, las familias de la calle Ignacio Zaragoza, entre la Doroteo Arango y Felipe Ángeles, de la colonia José Rebollo Acosta continúan padeciendo el temor y la angustia por la falta de un drenaje adecuado, tanto pluvial como sanitario.
Esta calle se ha vuelto más conocida por sus banquetas altas, pues las familias han tenido que levantarlas para proteger sus viviendas debido a que en unas horas de precipitación pluvial puede acumularse el agua hasta casi un metro.
Con unas horas de lluvia intensa, es un hecho que requieren el apoyo de la dirección de Protección Civil, e inclusive del Sideapa para que puedan desaguar, de lo contrario sería imposible salir de sus viviendas, y sus pertenencias quedarían inservibles.
La señora Virginia López, vecina del sector desde hace 23 años, recuerda que fue después de que pusieron el pavimento que disminuyeron los problemas con las inundaciones, pero aún y ahora cuando se presentan muchas personas no pueden hacer sus actividades diarias como ir a los trabajos e inclusive a la escuela.
En esta calle, la mayoría de las casas tienen banquetas altas, escaleras, e inclusive unas barreras de cemento cercanas a las puertas para evitar que el agua pluvial ingrese a las viviendas.
Uno de los casos más notables de la José Rebollo Acosta
Uno de los casos más notables de los conflictos de las familias de esta calle, es de Rocío Reyes quien vive en este sector desde que se creó la colonia hace alrededor de 25 años, “desde que empezó así ha estado.
“Cada vez sube más el nivel del agua, sino llueve se sube el drenaje”.
Lo más triste que ha vivido la familia recientemente, fue hace poco, pues sus padres tienen su domicilio frente a su casa, pero mientras su papá intentaba arreglar el drenaje, captó una infección y falleció hace alrededor de cuatro meses.
“Le entró una infección destapando la alcantarilla, le mocharon sus dedo, y de ahí se fue para abajo”.
Además de daños en muebles, las afectaciones en la infraestructura de las viviendas han aumentado, pues se observan cuarteaduras en paredes y humedad de aproximadamente medio metro, lo cual ocasiona mayor preocupación entre las familias.
Ante esto, hacen un llamado a las autoridades, con la finalidad de que tomen en cuenta su situación y los consideren para llevar a cabo un buen proyecto de drenaje, tanto sanitario como pluvial.
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