Trinidad Gutiérrez López con 80 años de edad, durante gran parte de su vida ha participado en maratones y carreras atléticas, y aunque actualmente son pocas las que se han organizado en La Laguna, asegura que se mantiene activo y diariamente sale a correr.
Señala que esta actividad la inició siendo muy joven y fue una casualidad, pues en su casa se encontraban peleando unos perros y al no encontrarse nadie corrió en busca de uno de sus hijos.
“En dos cuadras me cansé y me senté y estando fuerte todavía, y dije, dos cuadras y sentarme, ahí fue cuando inicié hacer mis ejercicios y practicar”.
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Recuerda que su primera carrera fue de 3 kilómetros en la Iglesia de San José de Gómez Palacio, en donde cada año la organizan; fue de ahí cuando con el apoyo del DIF continúo con otras carreras tanto en la región como en otras parte del país, entre ellas: Chihuahua, Monterrey, México, Durango, Químicas del Rey, Bermejillo en donde corría 24 kilómetros hasta el puente de Ojuela en Mapimí.
“Ya ahorita son una persona más de edad, pero todavía salgo a trotar unos 3 kilómetros sin parar y toda mi vida me gusto hacer ejercicio para seguir adelante”.
Trinidad llegó a obtener más de 250 medallas de las diversas carreras atléticas en las que ha participado, sin embargo, asegura que algunas de ellas las ha obsequiado a familiares y amigos.
Padre de 7 hijos, siempre ha tenido el apoyo de ellos, quienes en las carreras locales siempre acudían a echarle porras.
“Cuando corría los maratones se iban aquí al bulevar Miguel Alemán, porque pasábamos corriendo todos y yo los 42 kilómetros, la verdad los corría en 4 horas, pero siempre terminaba”.
“La vista no me ha impedido correr”
Durante estos años que ha dedicado a las carreras, manifiesta que su familia se siente orgulloso pues se mantiene activo y tiene un mejor estado de salud, aún y cuando desde hace ya tiempo presenta un problema en su vista, pues ha sido intervenido en 8 ocasiones.
La vista no le ha impedido correr, ya que en los lugares a donde ha acudido a participar lo ha hecho con el grupo de personas con capacidades diferentes.
Trabaja como empacador en dos tiendas
Aparte de ejercitarse, Trinidad trabaja como empacador en dos tiendas de autoservicio, en una de ellas entra a laborar a las 7:00 y sale a las 11:00 de la mañana, regresa a descansar un rato a su casa y luego se va a su segundo empleo.
“A mí me gusta trabajar y seguir adelante. porque estar aquí encerrado es una enfermedad, por eso me gusta estar activo, moverme, seguir con salud. Estoy agradecido con mi Dios que me ha dado fortaleza”.
A pesar de que siempre ha disfrutado sus carreras, una de las situaciones tristes que le tocó fue la muerte de varios de sus compañeros atletas, lo cual asegura, es porque no estaban bien entrenados, pues para participar en una carrera, hay que saber correr.
“Yo tenía la costumbre de salir trotando al pasito y según mis piernas poco a poco iba acelerando para llegar a mi meta”.
Una de las principales recomendaciones que hace Trinidad a los jóvenes, es hacer ejercicio y poder tener una buena salud, pues lamentó que en la actualidad muchos de ellos estén involucrados en algún tipo de droga.
aarp