Alrededor de 200 personas del gremio médico y estudiantil se manifestaron durante este domingo en La Laguna, para exigir a las autoridades académicas y del estado, mayor seguridad y mejores condiciones de trabajo en los lugares donde realizan su servicio social, esto luego del reciente asesinato de Erick, médico pasante en la comunidad de El Salto, en el municipio de Pueblo Nuevo, Durango.
El contingente arrancó desde la réplica de la Torre Eiffel en Gómez Palacio minutos después de las 18:00 horas y tomó el bulevar Miguel Alemán y caminó hacia el puente Plateado; de ahí se encaminó hacia la Plaza Mayor de Torreón donde terminaría el recorrido.
Gabriela Orozco Ruelas, médico pasante de servicio social presente en la marcha, manifestó que las condiciones que tienen que pasar en sus estancias, ya sea dentro o fuera de la región, son deplorables y viven en constante ambiente de inseguridad y abusos.
"Desde el 2011 se han estado viendo muchos abusos sobre médicos pasantes, que se nos ve como mano de obra barata, que nos mandan a zonas rurales sin las condiciones necesarias como de seguridad. Estamos en condiciones insalubres, de inseguridad y adversas en general".
A la marcha se convocó a los estudiantes y pasantes de instituciones que imparten la carrera de Medicina en la región lagunera como la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC) y la Universidad Autónoma de Durango (UAD), a los cuales se les unieron algunos docentes y padres de familia.
La marcha fue silenciosa pero con exigencias de alto volúmen. "No sabía que ser médico podría costarme la vida", "Un médico muerto no salva vidas", "No al servicio social", "Soy mujer, soy mexicana y soy médico, ¿por cuál moriré primero?", "Los posicionamientos no salvan vidas", “Justicia para Erik", eran algunos de los mensajes en cartulinas de los manifestantes, en su mayoría con la bata que caracteriza su profesión.
También padres de familia llevaban las leyendas como "Temo por la vida de mi hija", "Queremos justicia", mensajes que se veían a simple vista ante los peatones, mientras que los automovilistas se solidarizaron a su pasó con orden vial y respetando a los manifestantes que venían acompañados por dos ambulancias.
Al arribar a la Plaza Mayor de Torreón el contingente se colocó en la parte de las escaleras y se realizó un pase de lista. Ahí se pronunciaron en contra de los hechos violentos en los que uno de sus colegas fue ultimado mientras realizaba su servicio y pidieron a las autoridades garantizar la seguridad en sus estancias en su proceso profesional fuera de la región.
Por su parte, con un posicionamiento en mano que se pretende llegue las autoridades, la joven Casandra Cota Monárrez expresó: "Exigimos mejores condiciones de seguridad para nosotros y condiciones propias para trabajar, mientras no se den, nos seguiremos negando a ir a las comunidades alejadas, donde repetitivamente somos víctimas de la delincuencia", complementó.
Dentro de su posicionamiento también denuncian que las autoridades de salud y las jurisdicciones sanitarias amenaza los pasantes con retirarles su proceso en caso de seguir las recomendaciones que a nivel rectoría emitieron algunas universidades para el retiro de los pasantes de las comunidades alejadas.
Actualmente el servicio de plaza se divide en A, B y C, dónde la primera se presta el servicio social en la misma región, los de la plaza B se desarrollan en zonas ejidales y finalmente la zona C en sectores alejados o serranos del estado. En ese contexto, los estudiantes señalan que las condiciones son las mismas en cualquiera de estos sectores.
aarp