Del 1 de enero al 10 de junio, la Comisión Nacional Forestal (Conafor) reportó 5 mil 943 incendios forestales en el país, que afectaron 449 mil 033 hectáreas, esto representa 67 por ciento más superficie quemada en el mismo lapso de 2020, cuando 5 mil 163 incendios siniestraron 267 mil 687 hectáreas; mientras que en el registro histórico desde 1998, la superficie quemada en lo que va del año, ocupa el quinto lugar.
“Es una temporada crítica, está en el quinto lugar en el histórico de incendios forestales, en cuanto a superficie forestal afectada. Tenemos 450 mil hectáreas en este año, que a diferencia de 2019 que también fue una temporada crítica o en el 2017 que fue un año Niña, vamos por debajo”, dijo César Robles Gutiérrez, subgerente de Planeación e Información en manejo del fuego de la Conafor.
En entrevista con MILENIO, el funcionario explicó que la situación meteorológica es fundamental en el comportamiento de los incendios forestales, por lo que cuando se registran años con fenómeno de La Niña, estos siniestros se presentan con mayor frecuencia e intensidad, tal como ocurrió en los años 1998, 2011 y 2017, los años con el mayor número de incendios.
Aunado a las condiciones meteorológicas, como la sequía que se presenta este año, se conjunta la topografía accidentada y acumulación de combustibles, que tienden a contribuir en incendios más explosivos, indicó.
Destacó que en coordinación con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la Conafor ha identificado que el país experimenta un incremento de la temperatura promedio anual, por lo que la afectación también es mayor.
“Este mismo año, de enero a mayo, tenemos un aumento de la temperatura de 1.2 por ciento que el año pasado en el mismo periodo. El aumento de la temperatura reseca más los combustibles forestales y por consiguiente tenemos mayor agresividad de los incendios forestales”, destacó.
De acuerdo con el reporte de la Conafor, las entidades federativas con la mayor superficie afectada son Guerrero (75 mil 667 hectáreas), Durango (57 mil 061) y Chihuahua (43 mil 232), seguido de Nayarit (33 mil 412), Chiapas (33 mil 327), Nuevo León (32 mil 718), Michoacán (26 mil 837), Oaxaca (26 mil 204), Estado de México (15 mil 246) y Tamaulipas (13 mil 391), que en conjunto representan el 80 por ciento del total nacional.
En tanto que por mayor número de incendios, las entidades más afectadas son: Estado de México (mil 492), Ciudad de México (875), Michoacán (617), Chihuahua (511), Puebla (301), Tlaxcala (273), Chiapas (263), Durango (226), Jalisco (168) y Morelos (153), que en suma representan el 82 por ciento del total nacional.
Del total de incendios forestales, 610 (10 por ciento) correspondió a ecosistemas sensibles al fuego, afectando una superficie de 42 mil 378 hectáreas (9 por ciento) del total nacional.
“Solo el 9 por ciento se ha presentado en ecosistemas sensibles al fuego, quiere decir que estamos haciendo un esfuerzo para que aquellos ecosistemas que tardan mucho más tiempo en recuperarse, reduzcan lo más posible la afectación, son 42 mil hectáreas en ecosistemas sensibles al fuego, como selvas altas, bajas, medianas y bosque mesófilo de montaña”, indicó Robles Gutiérrez.
Además, de acuerdo con la Conafor, de las 410 mil 908 hectáreas afectadas, el 93 por ciento de la superficie afectada correspondió a vegetación en los estratos herbáceo y arbustivo y el 7 por ciento a arbóreo.
El funcionario destacó que el presupuesto para la operación del Programa de manejo del fuego es de aproximadamente 635 millones, que aseguró, no ha sido afectado por los recortes.
“Este presupuesto se ve aumentado porque tenemos apoyo de un presupuesto para compensación ambiental, para la atención de los incendios a través de recursos de fideicomisos, brigadas que se contrataron a través de este esquema de compensaciones, viene de un fondo forestal que opera la Conafor”, explicó.
Destacó que de acuerdo con la Ley general de desarrollo sustentable establece que los propietarios tienen que ser los primeros en responder al fuego, seguido de los municipios o los responsables de Áreas Naturales Protegidas, gobiernos de los estados y finalmente la federación.
“La Conafor, actualmente está operando cerca de 24% de los días-personas por temporada, quiere decir que del total de días-persona a nivel nacional, que son 296 mil 478 días persona, que es como se contabiliza la operación de los combatientes en los incendios forestales, el 27 por ciento corresponde a propietarios y poseedores y en seguida entra la Conafor con cerca del 22, 23% entre brigadas oficiales o en esquemas de apoyo, brigadas rurales, pago por servicios ambientales; estamos atendiendo en segunda instancia los incendios forestales, una respuesta muy importante”, explicó.
Aumento en la temperatura
Asimismo, indicó que el efecto de los aumentos en la temperatura se ve reflejado en todo el territorio, por lo que actualmente las temporadas de incendios forestales son anuales.
La Conafor destaca que el fuego forma parte de la dinámica natural de algunos ecosistemas forestales, pero puede generar daños de gran magnitud en otros. En la última década, los efectos del cambio climático han incidido en la frecuencia y la propagación de los incendios forestales mediante cambios en la alteración de la temperatura, la precipitación, la humedad en el ambiente, el viento, la dinámica de los combustibles forestales, la composición de las especies, la estructura de la vegetación y la humedad del suelo.
De acuerdo con el Programa Anual de Trabajo 2021 de la Conafor, los incendios forestales han magnificado su frecuencia, intensidad y peligrosidad, debido al cambio climático y a las omisiones en acciones preventivas.
De esta manera, para el periodo 1970 al 2020 se presentaron en promedio un total de 7 mil 072 incendios por año con 263 mil 324 hectáreas como media. En este periodo, destacan los años de 1998, 2011 y 2017 como los más críticos en cuanto a la superficie con presencia de incendios forestales con 849 mil 633; 956 mil 405 y 726 mil 361 hectáreas respectivamente.
DMZ