De un plumazo, sin consultar a los sindicatos ni a la comunidad estudiantil, la Cámara de Diputados estatal reformó la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), dejando atrás 50 años de tradición en la elección del rector, financiamiento a sindicatos y federación de estudiantes.
En fast track, la mayoría de los diputados de PRI, PAN, PRD aprobó la iniciativa enviada por el gobernador, Antonio Echevarría García, que busca evitar se replique la crisis financiera por la que atraviesa la casa de estudios que aglutina a 26 mil estudiantes de nivel medio y superior.
La ordenanza aprobada por la legislatura local señala que la universidad subsiste del recursos federales y estatales, por lo que se establece una función prioritaria a la actividad académica y de docencia, y que las actividades administrativas son complementarias.
En lo que corresponde a la creación del Consejo de Educación Media Superior, tendrá como fin definir las decisiones de ese nivel en la universidad.
En referencia a la Rectoría, se creará el Colegio de Elección, que será el encargado de organizar la elección de la máxima autoridad de entre los aspirantes que se registren.
Además los diputados aprobaron otorgar en comodato el estadio Nicolás Álvarez Ortega y el auditorio Amado Nervo a la universidad, a fin de promover actividades que le permitan obtener recursos financieros.
De forma inmediata, la Universidad a través del rector, Ignacio Peña González a través de un comunicado señaló que para tener la normatividad deseada, la mejor opción era consultar primeramente a la comunidad estudiantil, bajo consensos.
El rector solicitó a la Cámara de Diputados y al gobernador no cerrar el diálogo y permitir modificaciones a la Ley Orgánica.
En tanto, el ex rector de la Universidad y alcalde de Tepic, el perredista, Javier Castellón Fonseca, consideró como una tropelía institucional la reforma a la casa de estudios.
Protesta en CdMx
Los encapuchados que mantienen tomada la Preparatoria 9 de la UNAM desde noviembre pasado, rechazaron entregar las instalaciones tras una protesta de padres y alumnos del mismo plantel.
Ante esto, representantes de la Rectoría de la UNAM, en conjunto con la Unidad para la Atención de Denuncias (UNAD) y la Dirección General de la ENP 9 Pedro de Alba asistieron a las instalaciones para exhortar al grupo de inconformes a liberar el inmueble, pero fue negada su petición.
A través de un comunicado, la UNAM informó que un grupo de maestros y padres de familia exigieron que las instalaciones sean devueltas, reiterando que mantienen el compromiso de atender las demandas relacionadas con violencia de género, las cuales detonaron la toma del plantel.
En lo que se refiere a la prepa 7, Ezequiel A. Chávez, continúan las pláticas para lograr la devolución de las instalaciones.
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Con información de: Carlos Vega