Los cuerpos de tres mujeres indígenas que murieron en la frontera en su intento de cruzar a Estados Unidos llegaron al aeropuerto de la ciudad de Oaxaca y fueron trasladados a su pueblo natal, Coicoyán de Flores, donde serán sepultadas.
Las tres hermanas murieron el pasado 10 de febrero por hipotermia en el condado de Laguna, en San Diego, y sus cuerpos llegaron a México por paquetería.
El gobierno de Oaxaca informó que se hizo cargo de los gastos funerarios y del trasladado de las tres mujeres.
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La directora del Instituto del Migrante, Aida Ruiz, señaló que una vez que se recibió la solicitud de familiares y por indicaciones del gobernador Alejandro Murat,se realizó el apoyo y trámites correspondientes ante el Consulado Mexicano ubicado en San Diego, California, para repatriar los restos.
Ruíz García informó que en lo que va del año, son 39 los migrantes oaxaqueños que han muerto en Estados Unidos, cinco de ellos en su intento por cruzar la frontera.
Recordó que el año pasado se tuvo registro de 10 oaxaqueños que fallecieron en Estados Unidos y se gestionó un total de 184 traslados de restos mortuorios.
Paula, Margarita y Juana, de 29, 33 y 35 años, partieron de El Jicaral rumbo a Estados Unidos, luego de que el esposo de una de ellas, que vive en San Diego, las invitó a vivir con él.
Al llegar a Tijuana, las migrantes contactaron a un pollero que les cobró 50 mil pesos a cada una para cruzarlas a Estados Unidos, sin embargo, murieron cuando avanzaban por el desierto de Sandiego.
Paula Santos Arce dejó la orfandad a una bebé de un año 6 meses, cuya patria protestad es disputada por su padre, quien vive en Estados Unidos.
RLO